Cada 29 de septiembre celebramos el Día Mundial del Corazón desde el año 2000, más de cien países conmemoran este día. Con ello, se pretende llamar la atención sobre la necesidad de favorecer los entornos, volviéndolos más saludables y concienciar a la población de que practiquen hábitos cardiosaludables.
Desde la Asociación de Trasplantados de Corazón Ciudad de los Califas nos unimos a esta celebración, animando a toda la población en general, a cuidarse, a llevar una vida sana, que ayude a tener una excelente salud cardiovascular. El lema elegido este año Cuida tu corazón y tu corazón cuidará de ti, se puede lograr: haciendo ejercicio, comiendo de manera saludable, reduciendo el estrés y dejar el tabaco y este año que estamos sufriendo la pandemia de coronavirus, debemos de utilizar el corazón para protegernos y proteger a los demás. También es necesario conocer los riesgos que pueden desencadenar una enfermedad cardiovascular, como son: una elevada presión sanguínea, elevados niveles de glucosa, colesterol y del índice de masa corporal.
Además de alentar a seguir los cuidados recomendados, también queremos dar GRACIAS, así con mayúsculas, a nuestros ángeles, nuestros donantes. Gracias a ellos, gracias a sus familias, Gracias a un SÍ, al «Sí de la donación», al «sí» pronunciado en unos momentos tremendamente duros, hoy disfrutamos de una vida plena.
Las siguientes frases, han sido escritas por personas trasplantadas de corazón. En ellas, expresamos el eterno agradecimiento que sentimos, a los que nos han dado vida a través del trasplante:
«No hay nada más fuerte en el mundo, que el corazón de un donante».
«Gracias a tu bondad y al gesto desinteresado y generoso, tu corazón me dio a mi, la oportunidad de seguir en esta vida que por entonces se agotaba».
«Te acogí en mi pecho y desde el primer latido todo es agradecimiento, pues gracias a que llegaste a mi, puedo seguir viviendo».
«Me llenaste de nuevo de vida, una vida en la que con muchos cuidados te estoy protegiendo, para que en mi pecho con fuerza sigas latiendo, y así por muchos años darte las gracias cada día y en cada momento, que por ti sigo en este mundo».
«Difícil expresar con palabras lo que mi nuevo corazón siente. Si él vuelve a latir y yo estoy escribiendo ahora estas líneas, es gracias a la maravillosa voluntad de esas personas que donan órganos y permiten que otras sigan formando parte de este mundo. Una generosidad y solidaridad sin límites que, por suerte, permanecen intactas en nuestros días. Un enorme abrazo a estas personas y gracias de corazón».
(*) La autora del artículo es la presidenta de la Asociación de Trasplantados de Corazón Ciudad de los Califas.
