El 1º de Mayo de 2020 será sin duda diferente y especial, no sólo porque no podremos salir a la calle a reivindicar los derechos laborales conquistados a lo largo de los años, sino porque la difícil coyuntura económica que estamos viviendo, a consecuencia del Covid-19 y de la necesaria parálisis temporal de la economía, hacen que hoy, más que nunca, tengamos que aprovechar esta fecha para sentarnos a pensar sobre cómo reconstruir el mercado laboral y cómo volver a poner en funcionamiento nuestra economía. El 1 de Mayo es el día de la clase trabajadora, de los desempleados, de los jubilados, de los jóvenes...y a ellos nos hemos de unir los responsables políticos para, entre todos, encontrar la mejor salida a esta situación.

La crisis provocada por el Covid-19 ha tenido una vertiente sanitaria muy virulenta, con un alto número de víctimas y muchas personas contagiadas; pero también está teniendo una vertiente económica y sobre el empleo que nos preocupa especialmente. Somos conscientes de que la institución provincial no tiene competencias en esta materia, pero nuestra responsabilidad política y nuestro compromiso con los vecinos y vecinas de la provincia, con nuestros pueblos, nos impide dejarles solos en momentos tan complicados como los que estamos viviendo. Nuestros alcaldes y alcaldesas han demostrado sobremanera que con esfuerzo y trabajo pueden afrontar hasta la peor de las situaciones, como es una pandemia mundial, pero necesitan de nuestros recursos económicos, humanos y materiales para poder reactivar sus economías y para que el desarrollo económico y social y la generación de empleo vuelvan a marcar el camino.

La Diputación de Córdoba ha ido dando pasos en el ámbito económico desde la declaración del estado de alarma, pasos basados en un primer momento en la prioridad, la emergencia y la inmediatez de los efectos que podían tener las medidas adoptadas por el Gobierno. Así, en un primer momento procedimos a reducir la presión fiscal en la provincia, condonamos el pago de varios meses de alquiler a los inquilinos de nuestro Parque Público de Viviendas, respaldamos a los autónomos con ayudas específica y con la exención del pago de la tasa de basura a los negocios cerrados. A estas medidas hemos sumado otras más enfocadas a la reactivación económica, como la puesta en marcha de un plan especial, dotado con diez millones de euros procedentes de remanentes, para ayudar a los ayuntamientos a reforzar los servicios públicos, a impulsar su tejido productivo y a respaldar sus políticas sociales.

Somos conscientes de que la situación derivada de la emergencia sanitaria va a tener, y está teniendo ya, efectos demoledores en el empleo, como ya corroboran los datos que tenemos; pero este parón económico no puede amedrentarnos ni hacernos perder la esperanza en que existe una salida. No podemos comparar esta crisis con otras anteriores, pues todo hace pensar que con el reinicio completo de la actividad económica serán muchos los desempleados que volverán a sus puestos de trabajo en sectores vinculados al crecimiento económico de Andalucía como son la hostelería y el turismo. El proceso será lento, porque así lo marcan las fases de la desescalada marcadas, pero estoy convencido de que tanto la ciudadanía como los sectores productivos y las administraciones vamos a poner todo nuestro empeño en conseguir superar la adversidad.

Por último, me gustaría aprovechar la celebración del 1 de Mayo para rendir un sincero homenaje a todos los trabajadores y trabajadoras que, en las especiales circunstancias que hemos vivido, han dado lo mejor de sí mismos para que el resto pudiésemos quedarnos en casa. Ellos más que nadie han soportado el miedo y la incertidumbre provocados por un virus, hasta ahora desconocido, que ha tambaleado los cimientos de la sociedad que conocíamos. Sanitarios, transportistas, reponedores, tiendas de alimentación, trabajadoras de residencias de mayores y de ayuda a domicilio, agricultores, pescadores y ganaderos, entre otro muchos, han demostrado no sólo su capacidad de trabajo en tiempos convulsos, sino también su solidaridad y su compromiso.

Estoy convencido de que en nuestra provincia contamos con todo lo necesario para participar en la construcción de ese nuevo modelo económico y social. Contamos con un potencial humano óptimo para tener una provincia de prosperidad y crecimiento, con las ganas de trabajar y salir adelante de los vecinos y vecinas de nuestros municipios, con el impulso de nuestros emprendedores y empresarios y con el empeño y la lealtad de todos los que formamos la Administración Pública. Vamos a salir reforzados de esta situación porque no nos falta el coraje y la ilusión, porque no es la primera vez que solventamos una coyuntura compleja y porque hemos aprendido que la mejor estrategia para ganar la batalla es la que nace de la suma de todas las fuerzas y la unión de todas las voces.

* Presidente de la Diputación Provincial de Córdoba