Algo que ayer no pasó inadvertido por todos a todo los españoles fue la matización que hizo el Gobierno, a través del Ministro de Sanidad, Salvador Illa, sobre la salida de los niños a dar un paseo acompañados por sus padres.

Conviene recordar que en España seguimos en estado de alarma y en confinamiento, manteniéndonos aislados y de este modo poder dificultad la propagación del coronavirus e impedir que no se colapsen los hospitales por ciudadanos contagiados que necesitarían la asistencia hospitalaria.

Son ya 6 semanas, que se dice pronto, las que llevamos encerrados en casa y son los menores los que más ansias de salir pueden tener, su hiperactividad natural les empuja a correr, pasear, jugar, etcétera, y su juventud les anima a relacionarse con sus amigos, en definitiva, les resulta complicado entender esta situación y difícil soportar la falta de actividad y de interrelacionarse con normalidad con sus familiares y amigos, sin embargo, la sociedad y en especial los niños, están demostrando que entienden perfectamente la situación y el problema y están sabiendo comportarse de manera correcta y destacable, fruto de ello, es que hayamos doblegado la curva y disminuya tanto el número de fallecidos como de contagiados.

Resulta difícil otear cómo será la sociedad del futuro y si cambiará algo nuestro comportamiento, nuestra manera de relacionarnos, nuestra forma de trabajar, e incluso nuestra manera de viajar y pasar nuestro tiempo libre, todo eso lo iremos comprobándolo según vayan sucediendo los acontecimientos. No existen precedentes recientes ni comparables, de ahí que haya que ir adoptando decisiones y medidas continuamente.

Pero todo esto nos ha hecho ver una cosa clara, algo que no pasó inadvertido para muchos españoles. Hasta ahora sabíamos que el Gobierno atendía las recomendaciones de los expertos, concretamente en este asunto, de las organizaciones sanitarias y de los expertos sanitarios, pero ayer, fue un paso más allá, algo que hasta ahora no habíamos conocido, algo que nunca o muy pocas veces se ha dado, algo que quiero poner en valor, el hecho de que éste Gobierno escucha la opinión de los ciudadanos y las demandas la gente de la calle.

Eso que en principio nos puede parecer lo más normal del mundo, no lo es, y por eso quiero destacarlo, porque es algo importante y que demuestra que nuestro Gobierno no es ajeno a las peticiones y demandas de los ciudadanos y que sabe canalizar sus peticiones, que es capaz de modificar sus decisiones en base a la opinión de las personas, que no tiene reparo en rectificar y corregir, que es sensible y lo ha demostrado. Un Gobierno más humano, más cercano y que escucha.

(*) Alfonso Muñoz Cuenca es senador socialista por Córdoba