Llevamos varias semanas asistiendo a una encarnizada crítica al movimiento feminista y al gobierno de España por haber organizado y permitido la manifestación del día de la mujer, que históricamente se celebra el ocho de marzo. Hasta tal punto es encarnizada, que para bastantes ciudadanos (y alguna que otra ciudadana), esta manifestación es el origen de los miles de contagios de covid-19 que hoy tiene nuestro país y que nadie duda de que si no se hubiese celebrado hoy no existiría el coronavirus en nuestro país.

¿Qué hay realmente detrás de esta crítica perversa? Esa es una pregunta que tenemos que analizar y resolver para combatirla desde la izquierda y el movimiento feminista. Curiosamente, lo podéis comprobar, la mayoría de las personas que en redes sociales hacen una crítica al gobierno por haber permitido la manifestación no hacen esa crítica al gobierno por haber permitido cientos de partidos de fútbol, o de baloncesto o balonmano o de cualquier deporte de masas donde se acumulaban miles de personas en un mismo espacio, en muchos de estos casos cerrados. La inmensa mayoría de estas personas, tampoco critican que VOX convocara en Vistalegre a miles de personas en un acto, en el cual algunos de sus dirigentes ya mostraban síntomas de la enfermedad, en general centran sus críticas en las manifestaciones que se convocaron el 8 de marzo.

Muchas personas que hacen esa crítica, lo hacen desde una perspectiva de gestión política, por la que se indica que el gobierno debía de haber actuado antes con medidas mucho más contundentes, es decir, aparentemente que deberíamos de haber decretado el Estado de Alarma el día 7 cuando teníamos aproximadamente 400 infectados en todo el país. Pero si seguimos analizando los perfiles de estos ciudadanos y ciudadanas, eran los más reacios posteriormente a decretar el Estado de Alarma porque, por ejemplo, suponía la suspensión inmediata de la liga de fútbol o eventos como la semana santa. Curiosamente hubo un tremendo debate sobre la suspensión de la liga y de los partidos de la Champion League, con reuniones al más alto nivel, porque la Liga de Fútbol profesional se negaba en redondo a suspender la competición ya que iba a suponer una pérdida de muchísimos millones de euros, curiosamente fue la presión de los propios futbolistas la que hizo que finalmente se tomara esta decisión antes de la decisión del Estado de Alarma.

El mayor ejemplo es el de semana santa, ningún gobierno se atrevía a pronunciar la frase “la semana santa queda suspendida”, es más el Vicepresidente de la Junta de Andalucía, ya con miles de casos de coronavirus en España y cientos en Andalucía dijo textualmente “que la semana santa no se iba a suspender porque tenía la fecha fijada desde hace mucho tiempo, (algo que siguen analizando en varias universidades de comunicación, porque no se sabe muy bien que quería transmitirnos). El Alcalde de Sevilla, Señor Espadas, en un acto de valentía política sin precedentes, llegó a decir varios días antes del Estado de Alarma “para suspender la semana santa tiene que venir alguien de la OMS y explicarme y convencerme de porque hay que suspenderla”, el Alcalde de Córdoba tuvo un acto de autoridad política aún mayor, donde en un vídeo, ni siquiera reconoce su autoridad y dice “hemos llegado a un acuerdo y vamos a suspender la semana santa” el acuerdo era con el Obispo, dando una imagen de que no era él, si no el que manda de verdad, en la toma de decisiones importantes de la ciudad, cosa que ya era conocida, por cierto. Curiosamente y es digno de elogio, fueron las cofradías las que fueron anunciando que no iban a realizar ensayos ni actividades propias de cuaresma y semana santa, hasta que llegó el momento que no había posibilidad material de realizar la semana santa y ahí, se tomaron las “valientes decisiones políticas de suspenderla”.

Pongo estos ejemplos, porque esos ciudadanos y ciudadanas que critican al gobierno por haber permitido las manifestaciones del 8 de marzo, si este, hubiera tomado la decisión el 7 de marzo de prohibir TODOS LOS EVENTOS, posiblemente más de uno en las redes sociales hubiera llamado a inmolarnos frente al Consejo de Ministros y Ministras.

¿Contribuyó el 8 M a propagar el virus? es lógico que lo hiciera, pero al igual que los 4.000 partidos de fútbol, los 600 de baloncesto, las 18.000 misas, los conciertos, las colas en los supermercados, los bares y discotecas llenas, los centros comerciales, o cualquier tipo de actividad con gente que se produjera ese día y el posterior antes de decretar el Estado de Alarma.

Por tanto, detrás de la critica al gobierno y al movimiento feminista, hay dos elementos bien organizados y estructurados, el machismo y la derecha española, que van ahora más unidos que nunca. Aunque en realidad tampoco es ninguna novedad histórica, tanto el PP como VOX partidos de clara ideología conservadora, sobre todo el último de tintes fascistas, son los partidos más machistas del contexto político español y los principales responsables en las redes sociales de intentar atribuir al 8 de marzo a la cantidad de contagios del coronavirus, y sobre todo, su principal “obsesión” la de CRIMINALIZACIÓN DEL MOVIMIENTO FEMINISTA.

Sin embargo, es curioso como en la lucha contra el covid-19, son los gobiernos más conservadores, los que menos medidas, o más tarde las están tomando. Trump, Merkel, Jhonson, o el propio Bolsonaro, que es un auténtico lunático haciendo algunas de sus declaraciones, apenas habían tomado medidas o se niegan a hacerlo como en el caso de Brasil. En todos ellos y ellas, hay una cuestión casi más importante que la salud de las personas, el mercado y las ganancias de las empresas.

¿Fue temprano o tarde la medida del Estado de alarma y posterior confinamiento? A posteriori es muy fácil juzgar, pero vayamos a los datos. En Italia, se declara el confinamiento total de la población el 6 de marzo, con 9.172 contagios y 463 fallecidos, en Francia, el Estado de alarma se produce el 16 de marzo con 6.573 contagios y 148 fallecidos, en Reino Unido, el confinamiento se ordena por el Gobierno el 24 de marzo con 5.687 contagios y 281 fallecidos y en España, el 14 de marzo con 4.231 contagiados y 120 fallecidos, juzguen ustedes, con estos datos, si se hizo pronto o tarde.

A modo de conclusión, es importante seguir trabajando, colaborando y arrimando el hombro con movimiento feminista, a las movilizaciones y a cualquier tipo de convocatoria contra la violencia machista y contra el patriarcado, tan presente en nuestro país.

Además, tenemos que seguir haciendo pedagogía para hacer ver a la ciudadanía en general que lo público y las políticas públicas son las que nos están sacando y nos sacarán del difícil momento que estamos viviendo, por tanto, es fundamental defenderlas hasta las últimas consecuencias, unidos/as somos más fuertes, y no hay patria sin matria.