... ¡en el vertedero!

Cada lunes nuestra Ribera, a la altura del recinto ferial, amanece como podéis ver en las fotos. Ello es fruto del consumismo en el que inconscientemente nos vemos abocados.

Aquí somos responsables todos: quienes consumimos, quienes venden, quienes lo vemos y no denunciamos o ni siquiera informamos, quienes gestionan el servicio de limpieza, las normativas al respecto, Medio Ambiente, Educación, Sanidad, etc. y por ende, el Ayuntamiento, etcétera.Ser conscientes de que ésto está pasando, es un paso. Soluciones para ello habrá muchas: revisar responsabilidad sería el primer paso.

Como solución absurda a la par que realista se me ocurre que El Mercadillo se celebré en un recinto «hermético» para que al menos no sean el río y su fauna y flora los primeros damnificados y que las primeros víctimas del plástico seamos los generadores del mismo.

Otra solución absurda a la par que realista que se me ocurre es que el mercadillo se celebré en el vertedero, así los plásticos no habrá que recogerlos y los primeros damnificados seamos quienes no somos conscientes del problema.

A veces, ¡A grandes males, grandes remedios!