Este comienzo de año, gracias al contrapoder en nuestra tierra a los gobiernos de derechas con un gobierno estatal nuevo y valiente, está lleno de esperanzas y responsabilidad. Es el momento de la Política en mayúsculas y desde el ámbito municipal se abren posibilidades que antes teníamos limitadas.

Bajo este análisis, creemos que existen dos formas de trabajar como oposición en el Ayuntamiento de Córdoba, tras 7 meses en el consistorio con más sombras que luces, dicho sea de paso, por algunas áreas, organismos y empresas municipales. No todas por suerte.

La primera es oponerte a todo, un frentismo que es lógico viendo las políticas de la derecha en términos generales desde la Junta de Andalucía y desde el Ayuntamiento. Esta oposición deriva en dejar aparcado tu programa o tus propuestas.

La segunda es el consenso. Nuestra oportunidad es el sentido común y llegar a consensos para que nuestras propuestas, nuestro programa, nuestra actividad diaria sirva y sea útil a la ciudad. La unanimidad de lo obvio, evidenciar que estamos trabajando políticamente por Córdoba y su gente, es la propuesta transversal o la idea del bien común la que consigue el consenso. Otra cosa es la implantación o realización real de esa idea unánime. En ese momento estamos viendo la irresponsabilidad de los gestores, del cogobierno actual en algunas de sus áreas: Vivienda, servicios sociales, turismo... que tras consensos y acuerdos en pleno no están implantando los mismos de forma real. Al contrario más bien.

Por ello nuestra idea, nuestra forma de aplicar nuestro programa siendo minoría es un camino difícil, tortuoso y lleno de trampas.

Pero es el único camino, el consenso. Por eso, en este 2020 debemos analizar el coste social de tumbar o ningunear este consenso sin respuesta por parte del cogobierno de Bellido y Albás.

El bloqueo del rodillo de derechas, la opacidad y las formas autoritarias, tendrán un coste para la ciudad, pero también un coste político a estos partidos que hablaban de no dejar a nadie atrás en la ciudad. Un eslogan vacío si no hacemos que Córdoba sea de todos y nazca de las ideas de todos, porque además no cuentan con mayoría, que quizás se les ha olvidado.

Decidan. Consenso o bloqueo. Acuerdos o rodillos.

* Concejal de Podemos en el Ayuntamiento de Córdoba