El día 26 de marzo, nos enteramos de que el señor López Obrador, presidente mexicano, pide y por escrito a Felipe VI, Rey de España, y al Papa Francisco que se disculpen por, según él, los abusos cometidos por los españoles durante la conquista del actual México, 500 años después.

Al parecer, en esta ocasión el Gobierno español y sin decreto, que es de loar, rechazó pedir perdón a México. Pero cómo no, el «conciliador» partido de los podemitas, al señor López le da la razón, exigiendo a España una disculpa, acusando a los descubridores españoles, de barbaros, ladrones, mercenarios, asesinos... Pero por ejemplo, no acusa ni exige al dictador venezolano que pida perdón y abandone el trato, persecución, aniquilición del pueblo venezolano hoy en día, no haciendo falta retroceder 500 años. Sin olvidar, por supuesto, los coqueteos, negocios y beneficios de países como Irán, que encabeza a los países democráticos del mundo.

Por favor, señores y señoras podemitas, demagogos oportunistas, dejen de intentar aprovechar cualquier desfachatez y en lugar de atacar a España, nuestro país, su país, que como cualquier otro, su Historia está llena de luces y sombras, aciertos y fallos, repito como uno de muchos.

Así que señorías podemitas, les pido que si no quieren sumar, al menos no resten echando mierda ni escupiendo a nuestro país, porque recuerden señorías, que todas las palabras no se las lleva el viento y puede que el viento en vez de llevar devuelva.

Mi madre decía que los problemas se arreglan en casa, si los tienen, que los hay, soluciónenlos y no aprovechen cualquier tontería que desvie la atención de ellos. H