¿Se imaginen ustedes que la calle Sierpes de Sevilla o la calle Larios de Málaga, estuvieran a oscuras? Impensable ¿verdad? Pues eso en Córdoba, es una realidad. Una triste y vergonzosa realidad, claro. Da auténtico miedo pasar de noche por la calle Cruz Conde y sus alrededores. ¡Muy fuerte! Porque no estamos hablando de la última barriada de la última aldea de África, sino del centro urbano de una capital europea del siglo XXI. ¡Menuda imagen estamos dando! Digo yo, que la casta política cordobesa, tan amplia ella; tendrá algo que decir al respecto ¿no?