La final del Mundial sub-20 batió un récord de audiencia del fútbol femenino en España. Un total de 734.000 espectadores siguieron el encuentro entre España y Japón disputado el pasado viernes, convirtiendo el torneo de las chicas en el programa más visto del día en los canales de TDT con una cuota de pantalla del 8,8%.

La Copa del Mundo femenina permite extraer una primera conclusión por si alguien descreído lo dudaba: las mujeres al balón pueden dar espectáculo en España como lo dan en Alemania y, sobre todo, en EEUU, donde las jugadoras son iconos mediáticos y el futbol femenino tiene más seguidores que el masculino.

Que esto sea normal y no una excepción en España depende de muchos factores, entre los que destacan causas sociales como el machismo, la invisibilización de las mujeres futbolistas en los medios y la muy escasa o nula apuesta de las empresas por patrocinar este deporte. Para quien no lo sepa, el éxito del medallero en los Juegos Olímpicos es proporcional a los recursos que los países destinan a sus deportistas. Sin apoyo económico y buena gestión, llegar a lo más alto de un deporte es imposible hasta para los más dotados.

Vero Boquete, una de las mejores jugadoras del mundo, explicaba en una entrevista en el 2015 el calvario que tuvo que sufrir para poder ser futbolista. Con 6 años entró en su primer equipo y las niñas tenían prohibido jugar con los niños. Venía cambiada de casa, no podía ni entrar en el vestuario. Entrenaba pero no jugaba. Ella, como la mayoría, tuvo que dejar España para poder alcanzar el podio. Boquete confesaba que le dolía que las niñas quisieran ser Messi o Cristiano Ronaldo. «Lo que tendrían que querer es ser como nosotras».

El viernes, las chicas españolas lograron el hito de jugar la final del torneo y su capitana, Patri Guijarro, recibió la Bota de Oro y el Balón de Oro del Mundial. Cayeron ante Japón, pero son pioneras y una inspiración para que muchas otras que vienen detrás quieran ser como la capitana y el resto del equipo. Por eso, a pesar de no lograr la victoria, son unas campeonas.

* Periodista