El pasado día 15 asistí al rescate en su domicilio, por parte de los Servicios de emergencia de Córdoba, de un compañero que tuvo un accidente. Participaron efectivos de la Policía Local, del Servicio de Bomberos y de los Servicios Sanitarios. La coordinación fue excepcional y el personal que participó demostró una gran profesionalidad. La sociedad cordobesa debe saber que contamos con unos servicios de emergencia de la máxima calidad y del máximo nivel. Posiblemente las deficiencias tecnológicas en cuanto al material usado son compensadas por la profesionalidad, eficacia y buena voluntad de los participantes. La mejora del equipamiento del Servicio contra Incendios, en cuanto a vehículos ligeros, es imprescindible, para así dotar a este de la tecnología e innovación más actual, en consonancia con el momento en que vivimos y nuestro desarrollo industrial. El vehículo que usaron los miembros del cuerpo de bomberos, aunque estuviese en perfecto uso, era más de museo, que un vehículo para extinción de incendios y emergencias del siglo XXI. El Parque de Bomberos debería de estar dotado de un material de alta tecnología que permita a sus trabajadores desarrollar sus actividades con la máxima garantía de seguridad y eficacia.

* Exrector de la Universidad de Córdoba