Cada mes escuchamos a los responsables políticos, también gestores a su pesar, poniéndose una nueva medalla por el aumento del turismo en la ciudad, cuando el mérito está provocado por los conflictos internacionales en Oriente Medio y Mediterráneo. Otras ciudades están gestionando y haciendo sus deberes poniendo todos los medios para acaparar y ofrecer productos al visitante.

Me gusta contar lo que pasa en los plenos a la gente y ponerlo en conexión con nuestra Córdoba real, la del día a día, la de todos. El martes pasado, y a propuesta de la teniente alcalde de Economía, se suprimieron de los presupuestos municipales los 100.000 euros que estaban destinados a mejorar entre otros el aire acondicionado de nuestros museos. Les sugiero que visiten los Baños del Alcázar Califal, un verdadero horno donde Rafael, su portero, atiende sonriente al público con su uniforme empapado en sudor. Si queremos afluencia de turistas en verano la refrigeración es una prioridad.

Ya que están por allí, visiten el Alcázar donde, según sus trabajadores, nunca ha habido un julio igual de turismo. Pero cuando empieza la fresquita, como se dice por aquí, es imposible visitar los jardines. Están cerrados de noche. Desde el 15 de enero el espectáculo nocturno no se ofrece, el motivo debe ser político y complicadísimo.

Las tardes de verano todos los museos municipales están cerrados. Los comerciantes del centro explican que no hay ventas por las tardes porque no hay nada que ver ni lugares a donde ir en el casco histórico más allá de la Mezquita-Catedral que cierra a las 19h., la Calahorra y el Museo de la calle Cabezas. Todos ellos de gestión ajena a nuestro equipo de gobierno municipal.

Este fin de semana policía y bomberos han desalojado por seguridad al personal y usuarios del Centro de Recepción de Visitantes por la repentina aparición de grietas en la fachada y el interior. Se nos ha caído el alma a los pies cuando lo hemos visitado. Ese maravilloso edificio de arquitectura contemporánea ubicado entre el río y la Mezquita-Catedral tiene la mayoría de sus espacios sin uso. Vacíos de visitantes y vacíos de contenidos. Salas y salas cerradas desde hace 12 meses que se transfirieron al Ayuntamiento por la Junta de Andalucía y que este gobierno del PSOE-IU tiene olvidadas.

El centro de Visitantes en la Puerta del Puente son dos edificios, el principal se usa para ofrecer información turística desde un mostrador y tiene en la planta baja dos grandes cuartos de baño para los turistas que llegan en autobús desde el párking del entorno de La Calahorra. Su otro edificio está exento y en primera línea de la ribera, y contiene una sala equipada para congresos de hasta 200 personas que apenas se ha utilizado y una cafetería sin estrenar con terraza de vistas espectaculares al puente romano. También hay un espacio vacío proyectado para ser tienda.

En el Pleno del pasado martes la teniente alcalde de Hacienda de nuestro Ayuntamiento dijo que «no estamos en el gobierno para gestionar sino para hacer política». ¿Son decisiones políticas o son de gestión las que mantienen así las salas y los servicios de este edificio sin uso y cerradas?, no encuentro razonamientos políticos aparte de ineficacia en la gestión. ¿Es decisión política o de gestión la reanudación de las obras del Palacio de Congresos de Torrijos, paralizadas desde hace tres años?, no concibo que haya decisión política en esto, es un problema de gestión y de nuevo, de ineficacia.

Estamos ya cansados de mesas de falso diálogo para todo, reuniones interminables que solo dilatan la toma de decisiones. Necesitamos gobierno y valentía para ser la ciudad dinámica que necesitamos y objetivos y acciones concretas, la atracción de capital inversor de fuera es asignatura pendiente de estos que dicen que no nos gestionan sino que nos dirigen políticamente.

* Concejala del PP en el Ayuntamiento de Córdoba