pCUMPLEAÑOS

n¡Felicessesenta! N

***Alejandro Bolancel Rubio

***Córdoba

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Cumplir años es una de las realidades más grandes de nuestra existencia. Es por ello que nos sobreviene de manera natural, sin avisar, sin preguntar si nos importa o si estamos de acuerdo con envejecer año tras año; pero lo mejor es que ocurre para todos, sin distinción alguna: ricos, pobres, varones, hembras, negros, blancos... Todos estamos expuestos a cumplir con las reglas del tiempo.

Pero no todas las personas sufren el tránsito de los años de igual manera: hay algunos que no les importa, otros arrastran el paso de los años con benevolencia, los hay que desean tener más edad hasta que se dan cuentan de que están en un craso error, y por último, están los que pagarían por la fórmula de la eterna juventud.

Pero yo quiero hablar de otro tipo de personas no incluidas en este grupo que acabo de mencionar. Son aquellas que se sienten jóvenes a pesar de los años cumplidos, y no solo se ven así ellas mismas, sino que sus seres más queridos las ven de la misma manera; personas que luchan por la vida, transmiten energía, derrochan esfuerzo a diario y a pesar de toda una vida llena de avatares siempre miran hacia delante con una entrega inusitada; personas que constantemente están aprendiendo, y que a pesar de lo difícil que a veces se presenta la vida, ellos están ahí para prestar apoyo y hacerte sentir que los años vividos son solo anécdotas en el paso del tiempo.

Así que ya sabes, querida Carmen, que cumplir 60 años cronológicos no te exime de sentirte con muchísimos menos, y que ese espíritu tan juvenil que derrochas hace presuponer una longeva existencia de dicha y felicidad.

Tú perteneces a este grupo de personas privilegiadas donde el paso prematuro de los años te dan la fuerza necesaria para que puedas seguir viéndote tan joven y fuerte como hasta ahora:

!!Muchas felicidades, Carmen E. N.!!

pAUTOVIA

nLa DGT y lasalida 403 N

***Antonio Porras Castro

***Villafranca de Córdoba

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No dejan de asombrar las noticias que sacuden e irritan a los que asiduamente usamos la salida 403; en este caso le ha tocado, y será por turno, a la Dirección General de Tráfico (DGT). Esta sale a la palestra y deja entrever que el problema que han ocasionado los autores de esta salida, pues eso, no la han trazado tan mal, que no son tantos los atascos y que por supuesto hay quien está peor. La DGT, sacando, tipificando y definiendo esta envidiable obra de la ingeniería, llega a la siguiente conclusión: "no es un punto negro".

Para la DGT y su catálogo de definiciones, la salida 403 solo provoca retenciones puntuales y no superan el kilómetro.

Cuando Fomento trabaja en otro nuevo trazado por la ineficacia de esta carísima obra recién inaugurada, cuando la asociación de empresarios del polígono afectado se manifiesta por doquier; cuando todo el usuario que puede busca una alternativa y olvidarse de la pesadilla, aparece esta noticia tranquilizadora y sumamente reconfortante de la DGT para los que a diario nos jugamos la vida, para que así nos sintamos un poco más pisoteados, humillados y ultrajados.

Estimados usuarios y sufridores de esta salida, la DGT considera que nos quejamos de vicio, que hay otros puntos peores y, por tanto, hasta que las colas no superen el kilómetro no definirá esta maravilla de obra pública, sufragada por nuestros impuestos, como punto negro. Está claro que el color con el que cataloga esta salida, punto, es verde y por consiguiente se trata de un placentero acceso al polígono, a los hospitales y a la ronda. Encantador y maravilloso.

Gracias, DGT, por despertarnos de este hechizo.