¡Llevamos casi un año esperando! ¡Mamá!, me dice mi hija mayor --tiene cinco años--, ¿vamos al parque de Joaquín? (lo llama así porque el "compi" del cole de su hermana también lo frecuenta) ¡Quiero ver si han arreglado el columpio! ¡Oh! ¡Hoy tampoco hay columpios! ¡Mamá!, tienes que dejar una nota diciendo que ¡por favor! arreglen las cosas que se estropean en los parques.

...Y eso estoy haciendo. Harta de esperar (pronto hará un año que el parque infantil de la calle María La Judía de nuestra ciudad no tiene los dos columpios de antes) decido escribir "esta nota". A ver si "alguien" se da por aludido.

Lamentablemente, es solo un ejemplo. Muchos parques de Córdoba se han deteriorado con el tiempo; nadie se percata, no le damos importancia, parecen invisibles... pero... ¡no lo son! ¿Cuántos niños --y no tan niños-- disfrutan a diario en ellos? El abandono de estos espacios no solo estropea el paisaje, sino que da una imagen de la ciudad. Hay tantos y tantos casos... en cada jardín, en cada barrio, en el propio centro... Valga otro ejemplo: ¿qué pasa en el parque principal del Vial norte? El trenecito donde tantos pequeños se divertían lleva vallado casi dos años ¡Qué pena! ¡Con lo poco que cuesta hacer feliz a un niño!

Señores y señoras gobernantes, por supuesto que entiendo, y valoro muy mucho, sus esfuerzos en elaborar, implementar y llevar a cabo políticas adecuadas a las necesidades de los ciudadanos y, hoy por hoy, exigimos una buena gestión de las políticas socio--laborales; sin duda, son las prioritarias y, al fin y al cabo, son la base del resto. Pero, perdóneme, yo vuelvo a lo mío, que es lo de mis hijas, pero ¡es que también es necesaria la política social!: mantengan los parques.

¡Por favor!

Ahí, a diario, se prepara nuestro futuro.

M Luisa Rodríguez Copé

Córdoba