La Feria del Olivo de Montoro --que ya cumple sus 16 años-- abrió ayer sus puertas a las empresas --138 en esta ocasión-- tanto nacionales como internacionales del sector olivarero coincidiendo con la noticia de la autorización del comité de gestión de la Unión Europea al almacenamiento privado de otras 100.000 toneladas de aceite de oliva. El sector olivarero cordobés ha recibido con gran satisfacción esta medida que intenta paliar las bajas cotizaciones de este producto, que tanto tiene que ver en la economía cordobesa. Tanto el Gobierno de España, como la Junta de Andalucía, a través de su consejero de Agricultura, Luis Planas, como las organizaciones agrarias han respaldado esta medida. Pero no podemos olvidar que viene precedida por los bajos precios del sector y con la intención de elevar sus cotizaciones.
No obstante, y aunque el almacenamiento de aceite no constituya la solución definitiva para el sector --que lleva varias campañas con pérdidas--, es un alivio, como señalan las cooperativas, y una medida que en escenarios, como el inaugurado ayer en Montoro, generan optimismo. No hay que olvidar que estos eventos en los que el sector se reencuentra consigo mismo ayudan a estudiar, medir y unir fuerzas para encontrar soluciones a las malas coyunturas. Es lo que se busca en la Feria del Olivo de Montoro: soluciones a la compleja problemática de la producción y la comercialización del aceite de oliva. Claro, y conocer sus avances científicos y tecnológicos.
