Más que una agencia de calificación, Standard & Poors debería ser llamada una agencia de descalificación: cada vez que emite un informe --o lo filtra-- sobre la economía de un país de la eurozona, es para peor. Curioso, de todos modos, que se llame Standard & Poors, que imagino que serán dos apellidos pero que en inglés significan "medio" y "pobres". Porque cada vez que esta agencia abre la boquita, la clase media y los pobres se echan a temblar, ya que son siempre los paganinis de las crisis. Recuerdo la primera vez que estuve en Lisboa, en 1977, habían pasado sólo tres años desde la revolución de los claveles (a revoluçso dos cravos , qué bonito suena) y aquello era un carajal. Me acuerdo de una pintada de las de entonces, a brocha, no a espray, en una pared enorme: "Que os ricos pagar a crise, os pobres já no tem dinheiro ". La frase era el resumen de la historia de la humanidad, jamás los ricos, ni los que las han provocado, han pagado una maldita crisis; como acaba de demostrar este gobierno y los de alrededor, las crisis las pagan las nóminas, que para eso deben de estar; o sea, los paganos vuelven a ser los standards (los medios) y los poors (los pobres). Acabo de leer en el cuarto Alatriste de Pérez-Reverte que cuando Felipe IV alguien pidió un impuesto para los artículos de lujo y las grandes fortunas la propuesta fue como que no; la ruina de los Austrias se enjugaba malamente con los galeones de la carrera del oro y los impuestos sobre el pueblo. Siempre fue así, siempre es así, siempre será así. Y ahora, además, los ERE y la compra de cocaína con dinero público. Y encima Urdangarín...

* Profesor