Renovarse o morir. El clásico axioma resume el plan elaborado por la Federación Provincial del Comercio ´Comercio Córdoba´ para sobrevivir a los tiempos de crisis con un plan de negocio sostenible. El plan de choque presentado ayer por la asociación de los comerciantes cordobeses contempla acciones concretas en nueve apartados específicos. El objetivo: consolidar negocios, dotar de una una mayor calidad al servicio y agitar al ciudadano hacia el consumo con ideas frescas. Comercio Córdoba emplea en su libro de ruta conceptos que forman parte del catón del sector, tales como formación, innovación, calidad, acción gremial, fidelización, comunicación, información, promoción e infraestructuras. Una revolución absoluta en el sector. Entre las iniciativas que se plantean figura la puesta en marcha de la Escuela de Comercio, la creación de bolsas de empleo o habilitar aparcamientos provisionales mientras se desarrolla el Plan Municipal de Aparcamientos del Ayuntamiento. Pero la consolidación del comercio cordobés no es tarea exclusiva del tejido empresarial. Es una legítima reivindicación de los comerciantes obtener respuestas positivas en forma de implicación directa a las llamadas permanentes que dirigen hacia otras instituciones públicas y privadas. Los agentes sociales y económicos y entes privados y del propio sector de la provincia no deben escurrir su responsabilidad para dotar de energía a uno de los motores más importantes de la economía de Córdoba como es el comercio.
