El dato del tercer trimestre es una buena noticia, ya que el paro cayó en 14.100 personas. Es el primer descenso en la Encuesta de Población Activa (EPA) en dos años y un gran respiro psicológico, ya que creció en 802.000 y 126.700 personas en los dos trimestres anteriores. Así, la caída libre del paro ha finalizado. Como otros indicadores, el dato apunta a que la crisis está tocando fondo. Pero ello no implica que la tendencia se haya invertido, ya que el paro volverá a crecer en el último trimestre del año y en el primero del 2010. En el caso de Córdoba, aumentó en 2.000 personas durante el tercer trimestre del año y situó la tasa de paro en el 27,88%, frente al 27,23 del trimestre anterior,

Con todo, la bondad del dato no debe minusvalorarse, pues la mejora es innegable y el paro desciende en servicios, construcción e industria. Puede deberse en parte a las obras del Plan E, lo que indicaría que las medidas del Gobierno para suavizar la crisis tienen un cierto efecto. Pero también sería un error creer que estamos ya en el cambio de tendencia. Desde el verano del 2007, inicio de la crisis internacional, el paro ha pasado de 1,8 a 4,1 millones de personas y la tasa de paro ha subido 10 puntos, del 8% al 17,9%. Además, el paro baja, en gran parte, porque desciende la población que quiere trabajar, en especial la inmigrante.

Tenemos, pues, un buen dato, pero no un cambio de tendencia. El cambio de modelo productivo, preciso para recuperar empleo, exige un esfuerzo largo. Y no hay milagros.