Decía Benjamín Franklin que "un camino de mil millas comienza con un paso". Y, con un paso seguro y firme empezaron hace 25 años las mujeres de Cordobán. Cuestionando y rompiendo estilos, tradiciones y prácticas de vida que las hacían tener un papel de sumisión y obediencia hacia los hombres en espacios muy delimitados dentro del barrio, especialmente en el hogar, como la gran mayoría de las mujeres del principio de los años 80. Pero aquel grupo de mujeres querían ser protagonistas de su propia historia y, con tesón, crearon la Asociación de Mujeres Cordobán, que junto Al Alba y la Jara fueron de las primeras asociaciones de mujeres que se pusieron en marcha en nuestra ciudad. No cabe la menor duda que la situación de las mujeres ha evolucionado mucho desde entonces, pero ni podemos ni debemos olvidar que aquellos años fueron decisivos, porque las mujeres hicieron aflorar la revolución más profunda que jamás haya acontecido en la historia de la humanidad, la del nuevo pensamiento sobre el papel de las mujeres en el mundo; y en ese cambio participaron las mujeres asociadas en Valdeolleros.

A lo largo de su trayectoria Cordoban ha tenido claro que la igualdad y la justicia ni se da ni se regala, sino que es un derecho, y, en aquel año de comienzo, ese derecho estaba solapado por una sociedad llena de prejuicios, de los que era necesario sacudirse para elevar a las mujeres a los lugares que le correspondía por ley y por derecho. Y paso a paso han conseguido ser protagonistas de los cambios producidos en su entorno. No se han conformado con ser sujetos pasivos de lo que acontece en su barrio. Caminaron de la mano, junto a los compañeros en las reivindicaciones de espacios públicos, de centros de enseñanza, de alumbrados y pavimentaciones de calles, siendo pieza fundamental en la reivindicación para la creación del Instituto Angel de Saavedra. Sembraron las raíces para la unión y coordinación entre los distintos colectivos de Valdeolleros, compaginando su vida familiar y laboral con el compromiso y militancia social, obviando con orgullo "el que dirán" y sabiendo decir basta ya a tanta desigualdad, a tantas injusticias.

Estas mujeres brillantes, trabajan en la base, en la calle con las mujeres de a pie en todos los niveles, organizadas en distintos grupos dando herramientas para que todas y cada una de las mujeres que participan en la asociación ocupen el lugar que le corresponde en la sociedad cordobesa. Desde sus comienzos su objetivo principal es la promoción de los derechos humanos de las mujeres, pero también la participación activa en los distintos colectivos que trabajan en Valdeolleros: grupos parroquiales, en Caritas, Asociación Vecinal, Consejo de Distrito, Plataforma contra la violencia a las mujeres, ampas... contribuyendo a la gestación de los cambios producidos en un barrio obrero.

Si todo lo anterior es importante, por el trabajo voluntario y el compromiso colectivo e individual que llevan a cabo las mujeres de Cordoban con su barrio y con el conjunto de la sociedad cordobesa, entregando su tiempo familiar y de ocio en pos de una sociedad más justa, más humana, más de iguales, en un mundo donde lo que predomina es el individualismo, también cabe destacar, de esta asociación, su organización interna, nunca se sabe cual es la presidenta, ¡si la hay!, hay responsables de los distintos grupos de trabajo, todo se discute, las distintas propuestas y posiciones se hablan y defienden con pasión, se llegan a acuerdo y se respetan, dando contenido real a lo que verdaderamente es democracia y participación.

La constancia es la virtud por la cual todas las otras virtudes dan fruto. Mujeres de Cordoban, vuestra constancia, trabajo y sacrificio han dado su fruto en una asociación donde lo que importa es lo colectivo, donde los valores de solidaridad, de igualdad, de entrega, de generosidad son vuestras señas de identidad. Felicidades en vuestro 25 aniversario.

* Plataforma cordobesa contra la violencia a las mujeres