Estoy indignada, y como magistrada titular del Juzgado de Primera Instancia Núm. Ocho de Córdoba quiero explicar ante la opinión pública los motivos.

No soy política y no sé exponer con grandes argumentos la situación desastrosa por la que pasamos los juzgados de Córdoba, por lo que mis reflexiones irán acompañadas de meros datos objetivos.

Cuando yo llegué al Juzgado en el año 2000, ese año se terminó con 800 asuntos registrados, mientras que en el año 2008 hemos finalizado con 2.128 asuntos civiles. Han leído bien, han aumentado los pleitos en un 266%. Eso sí, la plantilla que debe encargarse de su tramitación es la misma y mi módulo de entrada (lo que en teoría debería entrar para una carga de trabajo asumible) es de 720 asuntos contenciosos al año.

Es cierto que se ha conseguido la creación de un único Juzgado, el número Diez, que ha entrado en funcionamiento este año, pero desde hoy los Juzgados Civiles vamos a recibir otros asuntos que antes estaban atribuidos al Juzgado de lo Mercantil que también comparte asuntos civiles. Y me dirán ustedes que es lógico, que la crisis está motivando un auge espectacular de los concursos (las antiguas quiebras y suspensiones de pago) y puede ser, pero necesito que ese retorno de asuntos alguien me lo justifique. Me explico, el Organo que lo ha decidido, para aprobar esta reforma en las normas de reparto, no nos ha solicitado ningún informe ni nos ha dado traslado del que sí ha instado al titular de lo Mercantil, pero tomando como datos los del año 2008 resulta que el Juzgado Mercantil que cuenta con una Sección Civil a la que están adscritos 4 funcionarios va a tramitar muy pocos asuntos civiles puesto que el año pasado solo se incoaron 5 juicios ordinarios y 3 verbales, mientras que en mi Juzgado, que cuenta con 9 funcionarios, se incoaron 1.430 asuntos contenciosos de los cuales nada menos 306 son Ordinarios, asuntos a los que hay añadir la Jurisdicción Voluntaria y la Ejecución (hipotecas, préstamos...) y un largo etc..

He contado con una plantilla extraordinaria, y he tenido suerte pero desgraciadamente los funcionarios titulares están pidiendo traslados a juzgados más cómodos. Es difícil comprender pero los interinos que los sustituyen, con alguna excepción, no cuentan con ningún tipo de experiencia y desconocen la tramitación y el programa informático que ha de utilizarse. Es más, no solo es la Junta de Andalucía la que les concede los permisos o vacaciones, sino que en aquellos casos que por ley tiene que pedir informe a la Sra. Secretario de este Juzgado, el informe no es vinculante, de hecho se concede aún siendo negativo. Sirva de ejemplo el caso de la última funcionara titular que ha pedido una Comisión de Servicio y que se le ha concedido con informe negativo y ello pese a que será requisito necesario para su otorgamiento el prevalente interés del servicio. De esta comisión de servicio, para marcharse al Juzgado de nueva creación sito en la planta baja del mismo edificio judicial, nos enteramos porque amablemente la propia funcionaria nos lo ha comunicado, porque de haber salido tarde de los juicios, hoy nos hubiéramos encontrado la silla vacía.

Juzguen ustedes.

* Magistrada-Juez de Primera Instancia Núm. Ocho de Córdoba.