Esta carta va referida a la política de fichajes de dos clubs de Córdoba: el Séneca CF y el Córdoba CF. Para ambos, se ha abierto la veda de fichajes en el fútbol base en Córdoba. Esto significa que comienzan a visitar los campos de otros equipos, metiéndose en el terreno de juego, o incluso en los vestuarios, todo con absoluta prepotencia. Intentan así captar jugadores para la próxima temporada, negociando directamente con los padres y mostrando total desprecio por las directivas de los clubs, que luchan a diario por el bienestar de sus jugadores y que son las que deberían conocer las intenciones de otros clubs, para autorizar a los padres a negociar posibles traspasos.

Un poco de ética, señores. Van ofreciendo el oro y el moro, asegurando ser el camino más corto hacia el Sevilla o el Córdoba. Pero tiremos de estadísticas: ¿cuántos de sus jugadores han llegado a ser profesionales? Apenas son conocidos. Todo es una estrategia: suben a los padres a una nube, desde la que ven a sus hijos vestidos de sus equipos preferidos de 1 División; pero una vez que están allí esa nube desaparece y tienen que poner de nuevo los pies en el suelo.

Es entonces cuando se dan cuenta de que nunca debieron abandonar el club de barrio en el que comenzaron. Donde están sus amigos de siempre. Donde conocen a sus entrenadores desde que comenzaron a echar los dientes. Donde se aprecia y se celebra su mejoría día tras día. Donde se repiten jugadas de estrategia una y otra vez, hasta que con esfuerzo se consiguen llevar a cabo. Donde los niños celebran con sincera ilusión un gol. Donde se juega en equipo. Donde, al fin y al cabo, ¡se hacen futbolistas!

Me gustaría que mis palabras llegaran a todos esos padres cuyos hijos están en el fútbol base, y a los que intentan dar falsas esperanzas, para que los dejaran en sus equipos. Es aquí donde recibirán la ayuda y la formación para ser un gran futbolista, y lo que es más importante: una gran persona. Para llegar a un equipo de primera no hay que hacer trasbordo en el Séneca o el Córdoba. Simplemente hay que trabajar duro sobre las cualidades innatas de los niños, intentando mejorar día a día. No se trata, pues, de ir abasteciéndose de los jugadores de equipos modestos, llevándose a sus jugadores insignia. Así es muy fácil, señores del Séneca CF y Córdoba CF.

J.L. Caballero

Córdoba