En las primeras páginas de la novela La derrota , de Francisco Bocero de la Rosa , un anciano que paladea lentamente una copa de vino, "aquel caldo de Montilla que era uno de los pequeños placeres de otoño", le dice al muchacho: "En 1808 muchos defendían que Francia era la gran esperanza de la civilización europea y de nuestra nación para superar su terrible decadencia...", internándose después en una historia que transcurre en su mayoría en Córdoba, como si el autor quisiera rendir homenaje a su ciudad natal. Al toparme con esa fecha, surge de inmediato la pregunta: ¿Es la casualidad o más bien la intuición periodística del querido compañero Paco Bocero, la que le ha llevado a escribir esta novela, buceando en la historia? Anteayer mismo, el propio Gobierno declaraba que quiere que 1808 sirva para repensar la idea de España, con motivo del bicentenario de la Guerra de la Independencia, efemérides que debe servir también "para recuperar el espíritu liberal y de unión de los españoles". Por eso, el primer acierto de Bocero ha sido escoger un tramo de la historia, relacionado con nuestra ciudad y, además, de palpitante actualidad. El segundo acierto, la visión global de lo que estaba sucediendo en aquellos días, con un estilo directo y sin florituras, una crónica que nos hace recordar los Episodios Nacionales , de Galdós . Apenas un puñado de personajes de ficción, codeándose con los protagonistas reales, sirven al autor para describir los sufrimientos de su ciudad hace ya casi dos siglos. Y por último, la edición de Almuzara que es una preciosidad, con una portada que constituye por sí misma una pequeña obra de arte y, en su interior, reproducciones de grabados de Goya , un retrato de Napoleón y varios mapas del enfrentamiento en Bailén. Enhorabuena, Paco.

* Periodista