Lo ocurrido en estos últimos cuatro años con el solar situado entre la avenida de Manolete y la calle José Dámaso Pepete, destinado por el PGOU a instalación deportiva (más concretamente a construcción de piscinas climatizadas), parece digno de aquella serie de nuestra infancia: el túnel del tiempo.

Hace cuatro años, en vísperas de un proceso electoral, la Junta de Andalucía (administración responsable de la financiación de la obra), y tras una larga espera de años,valla el perímetro de la obra y coloca los carteles en los que se indica el próximo inicio de la obra (así como la empresa encargada de la edificación). Durante muchos meses (ya pasadas las elecciones), no pasó nada. Hace un par de años (la memoria me puede fallar),se realizan las catas arqueológicas. Como no podía ser de otra manera en nuestra ciudad, aparecen restos. Se decide modificar el proyecto para adecuarse a la integración de los restos. Pasan otros dos años y no se hace nada. Este verano,se publica en prensa que ya está redactado el nuevo proyecto y que las obras comenzarían en breve (por segunda vez). Pasan los meses y nada. Bueno, sí, hemos vuelto a lo que había hace cuatro años, es decir, hartos de esperar, aparcacoches ilegales, inmigrantes sin trabajo e indigentes varios, han optado por arrancar aquella valla que nos colocó la Junta en vísperas electorales para que de nuevo el solar se convierta en un cutre párking (como ocurría antes del vallado). En fin... el túnel del tiempo.

¿Cuánto apuestan ustedes a que ahora que volvemos a tener elecciones vuelven a colocarnos los cartelitos que anuncian el comienzo de las obras?.

Francisco Bujalance Sánchez

Córdoba