Tras 'Juego de tronos' y 'The Big Bang theory', este año nos volveremos a quedar huérfanos de una serie icónica. 'Modern family' inicia en nuestro país el próximo miércoles, 9 de octubre, su 11 y última temporada. Un adiós con millones de fans, más de 20 nominaciones a los premios más importantes de la televisión (fue galardonada como mejor serie cómica en los Emmy) y horas de sonrisas.

No solo eso; la producción de 20th Century Fox y emitida inicialmente por la ABC ha ofrecido 'lecciones' sobre tres núcleos distintos de una misma familia en formato de falso 'reality' (los protagonistas se dirigen a menudo a cámara): una reconstruye el modelo tradicional (padres heterosexuales con hijos), otra aborda la homoparentalidad (pareja gay con hija adoptada) y la tercera refleja la diversidad cultural y generacional (un norteamericano de la tercera edad casado con una latina joven). Pero, ¿cuáles son las claves de su longevidad?

PULSÓMETRO DE LA SOCIEDAD

Las series familiares estadounidenses han mostrado los cambios de su época, como las comedias amables de los años 50 y 60, las corrosivas de los 70 y 80, cuando empieza una inversión de la jerarquía en la familia tradicional, y en los 90 y los 2000 se consolida la inversión y asistimos a nuevos modelos, como la mujer soltera en 'Sexo en Nueva York', o la homosexualidad, en 'Queer as folk'. 'Modern family' se sirve de los temas en boga en la sociedad de forma liviana, accesible y sin profundizar, y de ahí su éxito; producciones más rompedoras como 'Transparent' quedan para un público más restringido, explica Anna Tous, profesora en Comunicación Audiovisual de la UAB.

En este sentido, una de las claves del éxito de 'Modern family' pues no solo ha sido abordar las construcciones sociales, sino aplicar el factor 'cuento de hadas'. Pese a la dicotomía entre tradicional y moderno, y que todos los personajes son diferentes, siempre dialogan, se respetan y acaban unidos, analiza la mexicana María Eugenia González Alafita, profesora del Tecnológico de Monterrey y especialista en comunicación interpersonal.

LA ADOPCIÓN

Lily siempre supo que fue adoptada. Sus padres, Cam y Mitch, tratan su historia constantemente y de forma abierta. 'Modern family' ha contribuido a la normalización tras años en los que era un tema casi tabú. ¿Cómo? Por ejemplo, en uno de los episodios, Cam crea un libro de cuentos para Lily que habla sobre sus orígenes para eliminar el estigma de la palabra adoptada y que la perciba de forma positiva. También se usa el humor para ello: es mítico el capítulo en que la niña sufre una crisis de identidad cuestionándose si más que vietnamita no será gay.

LA LATINIDAD

Gloria encarna los estereotipos de la mujer latina: exuberante, exagerada, cariñosa, divertida y de fuerte carácter. Si bien ha recibido críticas, su intérprete, Sofía Vergara, alega que da visibilidad a los latinos. Algo, según ella, fundamental en un momento de creciente hostilidad hacia esta comunidad en EEUU, alentada por Donald Trump. ¿Qué hay de malo en ser un estereotipo? Así son mi tía y mi madre. Soy muy afortunada porque me han dejado interpretar con este gran acento que tengo, ha declarado la actriz a la edición norteamericana de 'Hola!'.

NUEVAS FAMILIAS

Una mujer soltera con un hijo se casa con un hombre que tiene dos hijos de la misma edad que ella, y juntos tienen otro niño más joven que los nietos del esposo. Todo muy complejo pero de esta familia han salido algunos de los momentos más entrañables del 'show'. Especialmente cuando Gloria se pone del lado de Claire y Mitch frente a su progenitor, y en las escenas que muestran la tierna relación entre Jay y Manny, el hijo de Gloria. Una manera muy políticamente correcta de fabular sobre que el amor puede con todo.

LA DIFERENCIA DE EDAD

Si bien el matrimonio de Jay y Gloria es en un principio puesto en tela de juicio, sobre todo por los hijos del primero, que dudan de la honestidad de su joven esposa, somos espectadores de cómo aprenden a lidiar con sus diferencias en casa y con las opiniones de su entorno.

LA HOMOPARENTALIDAD

Las series con familias homoparentales siguen escaseando, aunque 'The Foster', 'Hospital Central', 'Friends' y 'Modern family' hayan contribuido a normalizarlas. Por ello, esta última ha sido aplaudida y sus protagonistas, Mitchell y Cameron, se han erigido en iconos de la cultura gay. Aunque esta familia fue alabada en un principio, luego muchos han criticado los clichés que giran a su alrededor (por ejemplo, cuando los miembros de la pareja se cuestionan si serán suficientemente masculinos como para adoptar un niño). La serie invita también a reflexionar sobre la aceptación por su entorno y los derechos de este colectivo, desde el matrimonio a la adopción (para el recuerdo queda el capítulo en que Mitchell y Cameron verán denegada la adopción de un segundo hijo y Lily propone compensar el disgusto adoptando un gato).

EMPODERADAS

Tras un arranque casi misógino, en que las mujeres se enfrentan por temas de belleza y popularidad (la explosiva Gloria 'versus' la perfecta-ama-de-casa Claire; Haley, la hija guapa pero tonta, 'versus' Alex, la lista poco agraciada) y son presentadas como dependientes de sus maridos, con el paso de las temporadas se las ve ganando entidad como personajes independientes. Un buen síntoma de que las cosas van cambiando. Según 'Forbes', en el 2018 Vergara fue la actriz mejor pagada de la tele, muy por delante del actor con mayores ingresos, Jim Parsons, de 'The Big Bang theory'.

LA NORMALIDAD FRIKI

En 'Modern family', hay mucho friki: Phil, Alex, Manny, Luke... En la serie, los personajes nunca dejan de lado su personalidad para convertirse en otra cosa más socialmente aceptable, sino que se les enseña a aceptarse y vivir felices tal y como son, y encima resultan entrañables. Un lección de autoestima en toda regla.

EL NIÑO TRANSGÉNERO

En su octava temporada, la comedia se convirtió en la primera en dar un papel a un niño transgénero, el actor Jackson Millaker. Él encarna a Tom, un amigo de Lily, y su personaje tiene como objetivo reflexionar sobre la aceptación de los niños de este colectivo. Esta apuesta de los guionistas marcó un antes y un después. Con el tiempo, nuevos proyectos han abordado la transexualidad, como la exitosa serie 'Pose'.

LOS NUEVOS CONFLICTOS

Con el modelo de la familia tradicional de los Dunphy, se muestra que nadie es perfecto. Surgen problemas: de pareja, entre padres e hijos o hermanos, con el resto de la familia y, a su vez, con los nuevos fichajes (novios y novias). Ello ha permitido poner en relieve los nuevos conflictos familiares (embarazos adolescentes, abandono de estudios, falta de autoestima, papel de la mujer en el trabajo...).