El responsable de Al rojo vivo de La Sexta, presenta esta noche (21.30 horas) La Sexta columna: Privados de lo público.

--¿Lo público es mejor?

--Estamos en un país donde lo público y lo privado deben convivir y complementarse, pero sin que lo público pierda fuerza y valor. Los niveles de profundidad de una democracia los marcan la sanidad y la educación, porque no todo el mundo se puede permitir una educación y una sanidad privadas.

--Llegar a 500 programas de 'Al Rojo vivo' es todo un éxito...

--Es un misterio y un milagro, que hay que agradecer al equipo que me acompaña y que apasiona con la actualidad. Y a la cadena y al grupo que nos sigue dando esta oportunidad.

--Quizá porque los ciudadanos se han vuelto a apasionar con la información política?

--No solo la política, sino la económica, la social... Mire: los seres humanos recibimos ahora más informaciones en 24 horas que las de un hombre de la edad media en toda su vida. Nosotros intentamos ayudarles a articular esa información.

--¿Recuerda algún día en especial en estos 500 programas?

--Hemos vivido el final de la etapa Zapatero, la victoria del PP, el rescate de los bancos, el Barcenasgate- Pues bien, el acontecimiento más importante, el más trascendente para mí, fue el fin de ETA. Lo hemos vivido con absoluta naturalidad y, en cambio, para mí fue algo excepcional.

--¿Hay guerra de audiencias entre 'La Sexta noche' y 'El gran debate' de Jordi González en Tele 5?1

--Son compatibles. El gran debate lo hacen buenos profesionales que llevan tiempo haciendo un programa en el que hay política, sucesos, economía, temas sociales- Nosotros solo llevamos tres años y creemos que podemos apostar por temas similares, pero con un estilo diferente. La competencia nos hace mejores.

--Evole les echa una mano...

--Con los niveles de calidad y profundidad de Salvados, con esos datos de audiencia, el programa de Jordi Evole es el gran bombazo de la temporada para La Sexta. Y cuando hay tanta desencanto, tanto desapego, que haya tanta gente viendo un programa así da esperanzas. No hay que rendirse, que aún es pronto para ser pesimistas. No hay que resignarse: tenemos capacidad para salir de esta.

--¿Le ha ido bien a La Sexta la fusión con Antena 3?

--Sí. Nos ha permitido enfrentarnos a los rivales en igualdad de condiciones, con estabilidad y libertad.

--¿Sin presiones?

--Las presiones existen siempre, ahora, en el pasado y en futuro, Es una realidad con la que debe convivir el periodista. Forman parte de su ecosistema natural. Y uno tiene que aprender a convivir con ellas.

--Usted fue director de comunicación del Madrid. ¿La información deportiva puede ser imparcial?

--Yo suelo decir que un periodista ha de dar cuenta de los hechos más allá de las convicciones... salvo en los territorios deportivos, donde la pasión nos sobrepasa. Quizá hay gente que puede llegar a conseguirlo; yo creo que no sería capaz. Yo siempre digo que no soy imparcial, ni soy objetivo, ni en lo deportivo ni en lo político. Lo que garantizo es que intento ser honesto, incluso en lo futbolístico.