Quien paga por ver la tele no tiene nada que ver, ni en gustos ni en motivaciones, con el grueso de la audiencia que solo ve tele gratuita. Esta realidad queda ratificada en las series de ficción que triunfan en una y otra opción audiovisual. Salvo excepciones marcadas por grandes campañas publicitarias, o fenómenos imprevisibles --como House o The walking dead --, los grandes éxitos de las series de pago son producciones estadounidenses. Y dentro de estas, destacan las de acción. En cambio, la mayoría de estos mismos productos, cuando pasan a emitirse en abierto, no consiguen destacar entre las preferencias de los telespectadores de las cadenas sin codificar.

Tal como muestra el gráfico adjunto, el gran éxito de esta temporada en el pago (de septiembre del 2011 a junio del 2012) ha sido la segunda temporada de The walking dead , en la Fox. Esta producción de terror, que también tuvo una buena aceptación en su pase en abierto en La Sexta, ha sido la más vista de las teles codificadas en el conjunto de España.

La relación de preferencias de la audiencia de la tele de pago, y que le diferencia del público que no paga viene claramente marcada por su perfil: son un grupo joven (hasta 45 años), con estudios y con un nivel adquisitivo medio alto y alto. Este conjunto de personas --que según el último estudio de mayo conforman el 6% del total de la audiencia española-- está dispuesto a pagar por ver la tele; pero siempre con una serie de exigencias: calidad y poca (o nula) publicidad. Tal como explicaba Jesús Perezagua, actual presidente de Fox International Channels Europa, "son personas que ven poco la tele, pero cuando lo hacen quieren algo muy específico y bien definido. Por eso es importantísimo poder incluir el valor añadido, que es el de las primicias".

VALOR AÑADIDO

De la misma opinión es Eduardo Zulueta, director de Chello Multicanal, que lidera el mercado del pago con 22 canales codificados en el aire: "Ahora crecemos con servicios de valor añadido, como la alta definición, y también ofrecer nuestro producto al consumidor donde quiera, cuando quiera y como quiera".

Al margen de las primicias que, en las parrillas, suponen las series de acción, también tienen su hueco en el pago producciones que se pueden considerar clásicas y ya bastante vistas. Es el caso de Sexo en Nueva York y Mujeres desesperadas . Y es que estos productos tienen una audiencia (femenina) muy fiel.