Este año el Día de San Valentín, 14 de febrero, cae en miércoles, por lo que muchas parejas adelantarán al fin de semana la celebración del Día de los Enamorados. Ya sea en el 'finde' o el mismo día de la efeméride, te proponemos una alternativa económica para celebrar este jornada de la mano de tu pareja con un romántico paseo por la ciudad.

Paseo por la Ribera

Partiendo desde la céntrica plaza de Las Tendillas se bajará por la calle Jesús y María, por la que se divisa la torre de la Mezquita-Catedral. En este calle se encuentra la Escuela Superior de Arte Dramático y multitud de bares y restaurantes donde poder parar en algún velador. Después de menos de diez minutos de camino se llega a la Mezquita-Catedral.

Justo en frente de la Mezquita se encuentra la Puerta del Puente, desde la que se tiene unas vistas privilegiadas de la orilla oeste del río Guadalquivir, con el Puente Romano y la Torre de la Calahorra en frente. Es en este momento cuando surgen varias opciones, o girar hacia la derecha, o seguir de frente atravesando el puente, o ir hacia la izquierda por el Paseo de la Ribera, es esta la opción más recomendable. Por este tranquilo camino, que bordea el río constantemente, tras unos diez minutos se llega al puente de Miraflores, el cual habrá que cruzar y que ofrece una bonita vista del Casco Histórico de Córdoba.

Puente Romano iluminado. A.J. GONZÁLEZ

Después de cruzarlo se gira hacia la derecha, aunque, de nuevo, hay varias rutas posibles. Por un lado se podrá bajar por unas escaleras situadas a ambos lados del puente. Al descenderlas, se llega a una zona amplia y ajardinada a orillas del Guadalquivir. No obstante, la otra opción es más recomendable También se girará a la derecha, pero sin bajar por las escaleras, sino siguiendo por la acera Mira al Río. Este camino es preferible puesto que ofrece unas preciosas vistas de la Mezquita-Catedral y de la zona que la acompaña. Ambos caminos concluyen en la Torre de la Calahorra. Frente a ella está el mencionado Puente Romano, el cual habrá que cruzar mientras nos aproximamos a la Mezquita-Catedral. Una vez acabado el puente se volverá a la Puerta del Puente, donde dará por finalizada la ruta. Se recomienda realizar este camino al atardecer o por la noche (teniendo en cuenta el toque de queda), para contemplar la zona iluminada.

Mirador del río

Realizando un recorrido distinto pero por una zona cercana a la del paseo anterior, esta vez se partirá desde la Cruz del Rastro, desde la que habrá que girar a la izquierda para dsfrutar del último tramo del Paseo de la Ribera. En él se puede observar el Molino de Martos y la Ermita Santos Mártires, junto a ella se localiza el parque de Ruth y José. La elección de esta zona es porque suele ser más tranquila para pasear, además, el camino está ajardinado, es muy amplio y desde él se divisa el Puente Romano y la Torre de la Calahorra.

Fachada mediática del C3A CÓRDOBA

Una vez atravesado el parque, lo cual llevará entre quince y veinte minutos, se deberá girar a la derecha por el Puente del Arenal. Después de cruzarlo, dejando el Centro de Creación Contemporánea De Andalucía C3A a un lado, habrá que dirigirse a la calle Carmen Olmedo Checa, que es la primera a la derecha tras salir del puente.

Dicha calle discurre entre el C3A, los jardines del Rocío y el parque de Miraflores. Al final de la misma hay dos rutas posibles, por un lado andar hacia la izquierda, bordeando el río hasta alcanzar la Torre de la Calahorra o, si se desea, continuar de frente, pasando por el puente de Miraflores, que ofrece una panorámica magnífica, tanto del Puente Romano como de la Mezquita-Catedral. Tras recorrer el puente se llegará al punto de partida y dándose por concluido el paseo.

Avenida Vallellano

Una de las zonas más tranquilas y recomendables para pasear es recorrer los jardines que rodean la avenida Vallellano. Para este recorrido, lo aconsejable es comenzarlo desde la Puerta de San Rafael, desde donde se encuentra la estatua con el mismo nombre. Siguiendo recto por la avenida del Corregidor, a mano derecha está la antigua muralla romana, junto a la que se puede caminar, pasando por la Puerta de los Sacos hasta, diez minutos después, llegar a la Puerta Sevilla.

Una vez ahí se cruzará hacia la izquierda hasta llegar a la avenida Vallellano, donde se encuentra el paseo del mismo nombre. Es un parque amplio, con zonas para descansar y plagado de árboles. En su parte final se encuentra un pequeño lago artificial. Después habrá que seguir de frente para llegar a la plaza de la Constitución, un lugar con un encanto similar.

Se seguirá de frente hasta llegar al hotel Eurostar Palace, desde el que se continuará en la misma dirección por el Paseo de la Victoria. La mayor parte de esta lugar lo ocupa un parque en el que se encuentra el Mercado Victoria, lugar ideal para pararse a descansar y tomar algo, el Mausoleo Romano y los jardines Duque de Rivas.

Tras esto, de nuevo, habrá que seguir recto, aunque esta vez hasta llegar a los Jardines de los Patos, un lugar en el que se encuentran varias fuentes, además del monumento a Julio Romero de Torres, el que fuera sin duda el pintor más reconocido de la historia de Córdoba y que vivió entre los siglos XIX y XX. Tras cruzar el parque de los Patos y los Jardines de la Agricultura, podrá darse por concluido el paseo.

Vista de la arboleda del Paseo de la Victoria. SÁNCHEZ MORENO

Puerta de Almodóvar

Uno de los paseos preferidos por los cordobeses es, sin duda, el que parte desde la Puerta de Almodóvar, situada junto a los jardines que llevan el mismo nombre. En este camino se deberá seguir en dirección sur, bordeando constantemente la muralla por la calle Cairuan. Este lugar, de suelo empedrado, es recomendable recorrerlo de noche, cuando la iluminación, sobre todo del canal que acompaña el recorrido, le da un encanto especial. En la calle además, se encuentra la estatua dedicada a Averroes.

Tras quince minutos de trecho se llega una plaza. En ella habrá que girar a la izquierda por la estrecha calle Villa Ceballos, en la que se encuentra la estatura dedicada a otro personaje histórico de la ciudad, en este caso el filósofo Maimónides. Siguiendo por esta singular vía, que desemboca en la calle Tomás Conde, habrá que ir hacia la derecha, bajando hasta llegar a Caballerizas Reales. Una vez ahí, en frente se sitúa el Alcázar de los Reyes Cristianos. Tras contemplarlo desde fuera, e incluso acceder a él si se llega antes de las 18.00 horas, se tomará la calle Amador de los Ríos que baja hacia a la Mezquita Catedral. En su recorrido, al oeste queda la Biblioteca Pública, mientras que al otro lado de la calzada queda la Casa Sacerdotal y la Biblioteca Diocesana. La calle finaliza junto al Triunfo de San Rafael, situado a los pies de la Mezquita-Catedral, donde finalizará el recorrido.

Alcázar de los Reyes Cristianos. SÁNCHEZ MORENO