El color blanco predomina en las casas de los municipios de Andalucía debido a que se utilizaba para bloquear el sol, causante de las altas temperaturas propias de nuestra tierra. Sin embargo, los pueblos del noreste de Cádiz, frontera cambiante entre cristianos y musulmanes, tienen el título de pueblos blancos. Para aquellos que quieran hacer un viaje, estos son los que no te puedes perder si vas a Cádiz.
Los pueblos blancos que tienes que ver
Estos son algunos de los pueblos blancos que tienes que ver sí o sí.
Vejer de la Frontera
La magia flota en el aire del municipio, situado sobre un risco rocoso a 300 kilómetros de Córdoba. Todo está presidido por el castillo árabe restaurado y por la Iglesia del Divino Salvador, una mezcla del arte mudéjar y del gótico.
Vejer es también un destino gastronómico poco conocido. No podemos ir y no visitar el mercado de abastos para tomar un vino de jerez y unas tapas o El Jardín del Califa para saborear la cocina marroquí-andaluza.
Arcos de la Frontera
A lo largo de un risco escarpado, a 190 kilómetros de Córdoba, encontramos el municipio de Arcos de la frontera, el cual tiene una historia convulsa debido a su paso de reino taifa a territorio cristiano.
Perderte por la red de estrechas y evocadoras calles del casco antiguo es una experiencia única. Una parada obligatoria es la Plaza del Cabildo, donde se encuentran el lujoso parador, un castillo árabe, y el mirador que da al río Guadalete.
Grazalema
Situado en el Parque Natural Sierra de Grazalema, a 180 kilómetros de Córdoba, el Grazalema le otorga su encanto blanco al paisaje natural. Hay rutas excursionistas en todas las direcciones, por lo cual Grazalema es la localidad más popular para visitar el parque natural. La ruta de El Pinsapar pasa entre pinsapos de un verde intenso y es endulzada con los aromas de la montaña. También se pueden realizar actividades de aventura como kayak, barranquismo o parapente.
Este pueblo blanco es famoso por su miel, sus quesos de montaña y por las mantas de lana, de las que se puede aprender todo en el Museo Textil, cuya entrada es gratuita.
Zahara de la Sierra
Situada a 170 kilómetros de Córdoba, sobre el Puerto de las Palomas, se sitúa Zahara alrededor de un risco elevado con vistas a un embalse de color azul. Por encima del pueblo se eleva el castillo de Zahara, cuya recaptura por parte de los árabes animó a los cristianos a reconquistar lo que quedaba de la España árabe.
Una de las rutas más tonificantes de toda la Sierra de Grazalema comienza cerca de este pueblo. En ella, se desciende por una garganta verde de 100 metros de profundidad, acompañado por enormes buitres leonados que sobrevuelan el lugar.
Setenil de las Bodegas
Setenil de las Bodegas se encuentra a 150 kilómetros de Córdoba, un pueblo encantador situado en lo más profundo de la montaña. El castillo sigue en pie, igual que muchas de las casas-cueva originales, utilizadas por los musulmanes para defenderse de los ataques cristianos. Algunas de ellas se han convertido en bares y restaurantes, sobre todo a lo largo de la plaza de Andalucía y las calles Cuevas del Sol y Cuevas de la Sombra. Un pueblo ideal para pasear entre sus calles o disfrutar de la comida bajo la montaña.
