Al hablar del patrimonio de Córdoba, la mayoría se limita a mencionar algunos de sus monumentos más conocidos y reconocidos mundialmente como la Mezquita-Catedral, el conjunto arqueológico de Medina Azahara o la Judería. Sin embargo, basta con profundizar un poco más en la geografía e historia de la provincia para descubrir un patrimonio aún más singular como el que conforman sus castillos.

Un mapa de 27 fortalezas que salpican la geografía cordobesa y cuyo origen está, en parte, en la privilegiada ubicación estratégica de la provincia. Un legado de siglos que conforman un valioso testimonio arquitectónico, cultural e histórico.

En esta serie viajamos en el tiempo en un recorrido por cada uno de estos castillos, que pueden visitarse de forma aislada o en ruta, presentándose como un plan de escapada perfecto para los que gustan del turismo de interior y aunar el patrimonio con la naturaleza.

La primera parada nos lleva al archiconocido castillo de Almodóvar del Río, el Palacio de Portocarrero de Palma del Río, y el Alcázar de los Reyes Cristianos y castillo de la Judería en Córdoba capital.

Almodóvar, un castillo de cine

El castillo de Almodóvar del Río es una de las fortalezas cordobesas más internacionales. Un honor que debe agradecer al séptimo arte, ya que en las últimas décadas ha sido escenario de numerosos rodajes cinematográficos. Por él pasearon Ava Gardner y Omar Shariff en la serie de la BBC Dardanelos; Vanessa Redgrave y Richard Harris, en Camelot, o los personajes de la popular serie Juego de Tronos y Warrior Nun.

Esta fortaleza atesora un vasto legado que parte del siglo VIII. Las primeras noticias de la existencia de esta fortaleza parten del 741. Como explica el historiador Francisco García del Junco en su tesis sobre el Castillo de Almodóvar hacia el «740 Almodóvar servirá de límite en el primer reparto peninsular entre los musulmanes». Diecinueve años más tarde serviría de «refugio al último gobernador del Emirato Dependiente», derrotado por el Abderramán I, que se convertiría en el primer emir independiente de Córdoba.

Construida sobre un cerro, situado junto al río Guadalquivir, de 252 metros sobre el nivel del mar y 131 metros sobre la población de Almodóvar, como señala García del Junco. Esta ubicación, además, de dificultar el acceso de los invasores, «otorga la mayor de sus cualidades tácticas: un enorme alcance visual del territorio».

Vistas desde la fortaleza del castillo de Almodóvar.

Testigo privilegiado de la historia, será a finales del siglo XIX cuando su propietario, Rafael Desmaissieres y Farina, conde de Torralva, comience la restauración de la fortaleza, que en aquella época estaba en muy mal estado y que había sido usada como cantera. Para ello se puso en contacto con los mejores arqueólogos y especialistas del momento y fue el arquitecto Adolfo Fernández Casanova, restaurador de la Catedral de Sevilla, el responsable, junto con el conde, de devolver al castillo a su momento de esplendor. Hoy la fortaleza, propiedad del marqués de la Motilla, es una de las mejor conservadas y admiradas del territorio nacional.

Información de interés

Fortaleza levantada en el siglo VIII y reconstruida a principios del siglo XX por el conde de Torralva y el arquitecto Fernández Casanova. Es Bien de Interés Cultural desde 1985.

Horarios de visita

Del 1 de octubre al 31 de marzo

De Lunes a Viernes: 13:30 h y 18:00 h.

Fines de Semana y festivos: 18:00 h.

Del 1 de abril al 30 de septiembre

De Lunes a Viernes: 13:30h y 19:00 h.

Fines de Semana y festivos: 19:00 h.

*Dispone de visitas teatralizadas

Más información

https://castillodealmodovar.com/

Palacio de Portocarrero de Palma del Río

Como ave fénix resurgido de sus cenizas, así ha resurgido el Palacio de Portocarrero de Palma del Río de la mano de sus actuales propietarios, el matrimonio formado por Enrique Moreno de la Cova y Cristina Ybarra Sainz de la Maza, que llevan 30 años volcados en la restauración de este espléndido recinto que atesora entre sus paredes y jardines destacados retazos de la historia de España.

Palacio de Portocarrero, en Palma del Río. ELISA MANZANO

El palacio, también conocido como Palacio de los Condes de Palma, fue en origen un alcázar almohade que mandó construir en el siglo XII el sultán Abu Yacub, si bien la leyenda habla de que éste se levantó sobre una construcción romana del siglo II, en la que el procónsul de la Hispania Bética, Aulio Cornelio Palma, se instaló cuando refundó la localidad a la que dio nombre, un hecho que no está demostrado. Ya en el siglo XVI el alcázar sería reconvertido en palacio señorial.

Sus paredes están intrincadas de historia: lo han visitado las reinas Isabel La Católica e Isabel II de Inglaterra, en sus salones se celebró la boda de Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, con María Manrique de Lara y Figueroa, y en una de sus estancias nació en 1629 Luis Manuel Fernández de Portocarrero y Mendoza, canciller mayor de Castilla, arzobispo de Toledo y primado de España, -el cardenal Portocarrero, del que toma actualmente su nombre-. Y hasta ha sido escenario de película. Entre ellas, mencionar como ejemplo que Ridley Scott filmó aquí El reino de los cielos, que protagonizaban Orlando Bloom, Liam Neeson y Eva Green.

Información de interés

El Palacio, también conocido como Palacio de los Condes de Palma, es una construcción de origen almohade (s. XII) reconvertido en palacio señorial en el siglo XVI.

Visitas

Bajo cita previa y en función de los eventos programados.

Alcázar de los Reyes Cristianos, el jardín de Córdoba

Pocos espacios pueden presumir de llevar en el ADN el registro de casi todas las culturas que han formado parte de un asentamiento humano y sin duda el Alcázar de los Reyes Cristianos eso uno de esos lugares privilegiados. Se trata de una pequeña Pompeya, un tesoro arqueológico que ha sido testigo, como pocos de la historia de Córdoba y que recibió el título de Patrimonio de la Humanidad, junto al casco histórico en 1994.

Alcázar de los Reyes Cristianos en Córdoba.

Alberto Javier Montejo y el profesor de la UCO José Antonio Garriguet, autores de un artículo sobre la investigación arqueológica llevada a cabo en el recinto a principios de los 90, señalan que «el solar del Alcázar de los Reyes Cristianos y sus alrededores ya habían sido ocupados en época romana y visigoda, pero fue durante el periodo hispanomusulmán cuando dicho entorno se configuró como centro indiscutible del poder político, económico y religioso de la ciudad de Córdoba».

Fernando III toma Córdoba en 1236 y es aquí donde comienza la etapa cristiana de Córdoba. Es ese mismo año cuando «se produjo la repartición de los terrenos pertenecientes al antiguo Alcázar califal». Una parte se la reservó el rey, y el resto se la cedió «al obispo, a algunos nobles y a la Orden de Calatrava».

Sirvan dos datos para destacar su relevancia en la historia de España. En el Alcázar de los Reyes Cristianos nació María de Aragón, futura reina de Portugal e hija de lsabel y Fernando, y hasta este lugar se desplazó Cristóbal Colón para intentar convencer a los monarcas de que le financiaran su proyecto de llegar a las Indias por una nueva ruta occidental. Desde esta ciudad «instaba ante Isabel la Católica para que protegiese sus proyectados descubrimientos», como señala Teodomiro Ramírez de Arellano en sus Paseos por Córdoba. En los jardines del Alcázar hay una escultura conmemorativa de aquel encuentro entre el navegante aventurero y los Reyes Católicos.

Información de interés

Fortaleza construida a partir del siglo XIII en un espacio que formó parte del alcázar andalusí, levantado sobre restos romanos y visigodos. BIC desde 1931 y Patrimonio de la Humanidad desde 1994.

Horarios de visita

Horario de Invierno (del 16 de Septiembre al 14 de Junio)

Martes a Viernes: 8:15h a 20:00h

Sábados: 9:30h a 18:00h

Domingos y Festivos: 8:15h a 14:45h

Horario de verano (del 15 de Junio al 15 de Septiembre)

Martes a Domingo: 8:45 a 15:15h

Festivos: 8:45 a 15:15h

El lunes permanece cerrado.

Más información

https://alcazardelosreyescristianos.cordoba.es//?id=3

Castillo de la Judería

En San Basilio, en el barrio del Alcázar Viejo, se encuentran los restos de una de las fortalezas de Córdoba más desconocidas por los visitantes, quizá porque no son muchos los vestigios que han llegado hasta nuestros días. Se trata del llamado Castillo de La Judería, ubicado junto a la calle Martín de Roa, en la que permanecen los restos de lienzo de la muralla pretendientes a una fortificación almohade levantada en el siglo XII.

En aquella etapa de inestabilidad política y gubernamental, los almohades logran hacerse con el poder de Córdoba en 1148 y comienzan a fortificar distintas zonas de la ciudad, entre ellas el antiguo alcázar omeya.

Castillo de la Judería.

De las estructuras que se conservan «el elemento arquitectónico más singular y sobresaliente es la puerta de ingreso en recodo, conocida actualmente como Torre de Belén», recuperada junto a las murallas a principios del siglo XXI.

Información de interés

Se trata de una ampliación de la alzacaba omeya y zona fortificada correspondiente a la época almohade, que se remonta al siglo XII. Los restos del Castillo de la Judería se pueden contemplar desde las calles aledañas de la barriada cordobesa.