Silbon nace en 2010 a partir de la inquietud de dos jóvenes cordobeses, Rafael Díaz y Pablo López. Ambos, aficionados y consumidores de moda masculina, detectan un nicho de mercado sin cubrir y se deciden a explorarlo creando un producto de alta calidad, a un precio competitivo y con un cuidado trato al cliente. Estas premisas han convertido a Silbon en una firma de nivel nacional en plena expansión, un impulso y carácter que le ha valido el premio Cordobeses del Año en la categoría de Empresas.

A día de hoy, la firma cuenta con 19 puntos de venta, junto a varios corners en diferentes centros comerciales de El Corte Inglés (Vigo, Alicante y Valladolid), lo que ha supuesto un importante paso adelante en su expansión multicanal. Asimismo, hay que resaltar su salto internacional de la mano de la apertura de una boutique en París.

Pese a ese imparable empuje, que hace que la compañía gane posiciones en el mercado de manera continua, Pablo López asegura que su punto de referencia está en Córdoba, donde el pasado mes de agosto abrieron su primera flagship store. El establecimiento, ubicado en la calle Cruz Conde, tiene más de 500 metros cuadrados distribuidos en dos plantas en las que, además de las colecciones de temporada de la firma, están a la venta prendas de su outlet (hasta ahora solo accesible online) y de su división Made to measure, especializada en sastrería y trajes a medida. «Esta apertura es una muestra de nuestra apuesta por esta ciudad», indica López, quien añade que «siempre hemos llevado por bandera ser de Córdoba y así seguirá siendo». El CEO de Silbon no comparte la idea extendida de que en Córdoba es difícil sacar adelante los proyectos. «Considero que cuando se trabaja y se responde a lo que quieren los clientes, esta ciudad responde, y ese es nuestro caso».

Pablo López se muestra «muy orgulloso y agradecido» por el reconocimiento que supone el premio Cordobeses del Año, sobre todo porque es un homenaje «que parte del cariño de esta tierra, que siempre nos ha mostrado su apoyo».

La compañía cerró el último ejercicio con una facturación de ocho millones de euros, un 47% más respecto al ejercicio del 2017. Para 2019, Silbon prevé alcanzar un crecimiento de entre un 25% y 30%, hasta rozar los diez millones de euros, además de abrir varias tiendas más en España y otras en Londres y Lisboa.

Hace nueve años, pocos habrían augurado el éxito de aquella pequeña aventura que nacía con una colección de 30 chaquetas puestas en el mercado con una inversión de 3.000 euros. Su estilo british y sus inconfundibles raquetas le han puesto en bandeja convertirse en una marca de prestigio, que transmite un estilo de vida.