La princesa Leonor ha tomado esta semana la palabra por vez primera en un acto oficial, el día que cumplió 13 años, y protagonizó un acto conmemorativo de la Constitución en el que los tres poderes del Estado arroparon a Felipe VI, quien reafirmó la fidelidad de la Corona a la democracia y la Carta Magna.

Ante la mirada complacida de su padre, a su derecha junto al atril, y en presencia tanto de la reina Letizia y la infanta Sofía como de los máximos representantes del poder ejecutivo, legislativo y judicial, la heredera de la Corona dio lectura en el auditorio del Instituto Cervantes al artículo 1 de la Carta Magna, sobre el fondo sonoro de continuos disparos fotográficos.

«España se constituye en un Estado social y democrático de derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia y el pluralismo político...», comenzó a leer, con voz clara y segura, cuidando la entonación y sin olvidar mirar al público.

«La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado» y «la forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria», concluyó la princesa, entre fuertes aplausos de los asistentes, y dio un beso a su padre antes de regresar a la primera fila.

Previamente, don Felipe inauguró esta simbólica lectura íntegra de la Carta Magna, cuarenta años después de su aprobación por las Cortes el 31 de octubre de 1978, con el preámbulo en el que «la nación española» proclama su voluntad de «garantizar la convivencia democrática dentro de la Constitución y de las leyes», también rubricado por aplausos.

Al subir el escenario, flanqueado por banderas españolas, el monarca expresó su alegría por «compartir un día tan especial» con el Ejecutivo, los poderes del Estado y «tantos ciudadanos y ciudadanas», antes de subrayar: «Pocas maneras hay mejores para reafirmar, una vez más, la fidelidad y el compromiso de la Corona con la democracia y la libertad, con España y la Constitución».

La princesa presenció la intervención de las autoridades que la sucedieron sentada entre su padre y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien tomó la palabra tras ella para leer el artículo 2: «La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la nación española, patria común e indivisible de todos los españoles...», afirmación también acogida con aplausos.

En una ceremonia sobria que recordaba a la lectura anual del Quijote, se fueron turnando a continuación los presidentes del Congreso, el Senado, el Tribunal Constitucional y el Supremo, la vicepresidenta del Gobierno y dos de los tres padres de la Carta Magna aún vivos --en ausencia de Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, indispuesto--: José Pedro Pérez-Llorca y Miquel Roca Junyent. A Roca, que participó en el primero de los foros organizados por Diario CÓRDOBA con motivo del 40 aniversario de la Carta Magna, le correspondió el artículo 10, que regula el respeto a la ley de ciudadanos y poderes públicos.

En ese punto, un receso en la sesión de lectura permitió que Leonor diera las gracias a una periodista que la había felicitado por su cumpleaños, que los reyes y sus hijas posaran junto a los representantes de los poderes del Estado --Sánchez entre los presidentes del Congreso y el Senado-- y que conversaran todos unos instantes antes de abandonar la sede del Cervantes.

Ya sin tantas cámaras, se reanudó la jornada conmemorativa, en la que también se pudo ver a Antonio Muñoz Molina, Miguel Ríos, Rosa León y Adolfo Domínguez entre los estudiantes y ciudadanos anónimos que se turnaron en el atril.