El servicio de Psicología Clínica del hospital Quirónsalud Córdoba ha puesto en marcha un programa para niños con dificultades de la atención y el aprendizaje, que tiene como objetivo valorar e intervenir en dichas dificultades de aprendizaje o de la atención, y en los problemas emocionales y de conducta que se puedan derivar de ellas, tanto en el contexto escolar, como social y familiar. En este programa, que realiza la psicóloga infantil Alba Jurado, se identifican los factores psicológicos, familiares, sociales y escolares que influyen en las dificultades de aprendizaje y se diseña un plan individualizado de intervención. Se considera que un niño presenta dificultades de aprendizaje cuando tiene déficit en sus habilidades intelectuales, atencionales o lingüísticas, aunque el resto de procesos cognitivos estén bien preservados. Estos déficits se manifiestan aunque no existan alteraciones neurológicas graves y requieren una atención especializada. Los criterios de evaluación del trastorno específico del aprendizaje se centran en criterios diagnósticos como la dificultad en el aprendizaje y en el uso de las aptitudes académicas (lectura de palabras imprecisa o lenta con esfuerzo; dificultad para comprender el significado de lo que lee; dificultades ortográficas; para la expresión escrita; para dominar los datos numéricos o el cálculo y en el razonamiento matemático). Jurado explica que las dificultades de aprendizaje comienzan en la edad escolar, pero pueden no manifestarse totalmente hasta que las demandas de las aptitudes académicas afectadas superan las capacidades limitadas del individuo, como por ejemplo en exámenes cronometrados o en la lectura de informes complejos con una fecha límite. Incide en que cualquier dificultad en el aprendizaje implica un fracaso en la ejecución escolar, lo que provoca baja autoestima y puede desembocar en desinterés y apatía hacia las tareas escolares.