María de los Ángeles Madueño Ruiz ha sido analista durante 44 años en la Fundación del Patrimonio Comunal Olivarero de Montoro. Tras el cierre por parte de los patronos de una serie de almacenes, la almazara, una planta envasadora en Mora y el laboratorio, María de los Ángeles echó mano de su arrojo, adquirió la maquinaria a la Fundación y creó Laboliva cuando apenas le quedaban 16 meses para jubilarse. En este laboratorio ofrece análisis de la aceituna y sus subproductos, tanto a nivel de rendimiento como de humedad, riqueza grasa, materia seca sobre seco, riqueza grasa sobre seco, así como en los orujos y el alpechín. A los aceites les realizan la acidez, los próxidos..., «y si desean cata, al yo ser catadora profesional, también se la realizamos». Comenta Madueño que «este laboratorio es muy importante para los olivareros, ya que así pueden comparar el rendimiento con el que les diga el fabricante». Con ello, Laboliva entrega un certificado al olivarero en un plazo máximo de dos días. Para ello se ha rodeado de un equipo experto en el análisis de estos productos. r.C.A.