La aldea cardeñera de Azuel acogió el sábado la segunda edición de la Fiesta de la Morcilla Azueleña, a la que acudieron cientos de vecinos de la provincia para conocer de primera mano el proceso de elaboración de uno de los productos artesanos de este núcleo. La alcaldesa de Cardeña, Catalina Barragán, dijo a este periódico que «tras la primera cita, esta ha doblado el número de visitantes, hemos contado con más expositores, más actuaciones musicales y actividades de turismo activo». Por otro lado, Barragán resaltó el entusiasmo con el que han acogido los vecinos de esta pequeña aldea la llegada de viajeros, convirtiendo Azuel en un punto de encuentro para el resto del año. La regidora ha añadido que «este año se han habilitado más áreas de descanso para hacer más cómoda y agradable la estancia de los visitantes». En las calles principales de esta aldea cardeñera se montaron numerosos estands en una jornada plácida, en la que acompañó el buen tiempo y en la que además se pudo disfrutar de representaciones teatrales, batucada, guiñol en torno a la morcilla, recuperación de costumbres y tradiciones populares, y una gran exposición de pintura y de artesanía que cautivó al visitante.