Se entiende por atención temprana al conjunto de intervenciones dirigidas a la población infantil de cero a seis años, a su familia y al entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen el riesgo de padecerlos. Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del niño, han de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientación interdisciplinar y transdisciplinar. Por ello, la Universidad de Córdoba, a través de su centro de atención infantil temprana ubicado en el campus universitario Menéndez Pidal, en la facultad de Ciencias de la Educación, lleva desde el año 2009 atendiendo las necesidades de los niños cordobeses. Más concretamente de cerca de un centenar, ya que son cien las plazas de las que dispone, siendo de estas 70 concertadas con la salud pública, es decir de acceso mediante derivación pediátrica.

La respuesta a esta demanda comenzó a forjarse cuando en el año 2009 un grupo de profesores del departamento de Psicología de la Universidad de Córdoba decidieron llevar la teoría a la práctica. Los objetivos principales de este centro son los de desarrollar las capacidades de los niños que acuden a él; normalizar el curso del desarrollo en la medida de sus propias características y posibilidades; prevenir la aparición de trastornos secundarios; favoreces su integración familiar, educativa y social, mejorando su bienestar y contribuyendo a que alcancen su nivel máximo de autonomía y facilitar la adquisición de habilidades adaptativas, entre otros. Todo ello gracias a un equipo compuesto por once profesionales y liderados pos la directora del centro, Araceli Sánchez.