El proyecto de movilidad Erasmus+ con países asociados 2017-2019 de la Universidad de Córdoba (UCO) ha financiado 91 movilidades (51 de estudiantes y 40 de personal universitario, tanto de profesorado como de personal de administración y servicios), de las cuales 14 se han realizado desde o hacia instituciones ucranianas con las que la universidad cordobesa mantiene sólidas relaciones desde principios de los años noventa del pasado siglo. Valerii Petrusha, doctorando de la Universidad Estatal Agraria y Económica de Dnipro (DSAEU) de Ucrania, ha sido, como se conoce en la jerga de movilidad universitaria, «nominado» para participar en una estancia Erasmus en el primer cuatrimestre del curso 2019-2020 en la UCO. Su conocimiento de la lengua inglesa ha facilitado que fuera el seleccionado para acompañar al decano de la Facultad de Medicina Veterinaria de DSAEU, Ivan Biben, y al profesor Pavlo Skliarov, del Departamento de Cirugía y Obstetricia Animal, en sus movilidades Erasmus de formación.

-¿Por qué decidió participar en el programa de movilidad Erasmus con la Universidad de Córdoba?

-Erasmus supone una valiosísima experiencia para nosotros, tanto estudiantes como profesores. Visitar la Universidad de Córdoba nos ha aportado una visión completamente distinta del proceso educativo y las perspectivas profesionales, permitiendo ampliar nuestros horizontes e introducir en nuestra institución algunas cosas que hemos visto aquí. Por supuesto, es necesario estudiar en manuales y libros de texto, pero el intercambio de conocimiento y experiencia con expertos es igualmente importante. Conociendo la profesionalidad del personal de la UCO y el alto nivel de cultura ganadera de Andalucía, no tengo duda de que será muy interesante realizar una estancia en Córdoba.

-¿Qué diferencias ha encontrado entre la UCO y DSAEU?

-Lo primero que llama la atención es que la UCO es una institución mucho más grande. He podido también constatar, por desgracia, que nuestras aulas y laboratorios están pobremente equipados. En la Universidad de Córdoba los estudiantes dedican mucho tiempo a la formación práctica, mientras que en DSAEU el proceso formativo se centra en la teoría, debiendo después los estudiantes adquirir habilidades prácticas trabajando en ganaderías. Es fantástico tener la oportunidad de observar las diferencias y comprender qué nos falta y cómo podemos mejorar.

-¿Qué puede aportar Erasmus a la relación entre ambas instituciones?

-Esperamos que la Universidad de Córdoba pueda ofrecernos más estancias para estudiantes y profesores, así como poder iniciar proyectos conjuntos. Hace unos meses, discutimos ya con el profesor Carlos Pérez Marín la posibilidad de llevar a cabo un proyecto de investigación realizando parte del trabajo en Córdoba y parte en Dnipro. Esperamos obtener los máximos resultados de esta colaboración y que resulten de utilidad tanto para la investigación científica en Ucrania como para DSAEU en particular. También nos alegra recibir profesorado de esta universidad; estamos seguros de que podemos mostrar y ofrecer algo a nuestros invitados extranjeros.

-¿Y en cuanto a resultados personales?

-Por el momento, mi prioridad es investigar para la tesis doctoral. También es importante crecer profesionalmente y aquí las posibilidades son infinitas. Trabajar directamente con expertos extranjeros y practicar métodos europeos en el ámbito de la reproducción animal dará un fuerte impulso a nuestra especialidad, particularmente cuando estamos considerando crear en la Facultad de Medicina Veterinaria de DSAEU, un centro de reproducción para grandes y pequeños animales.H