Todo está preparado para el reencuentro de Manuel Díaz y Julio Benítez, los dos hijos toreros de El Cordobés. Será mañana en la plaza de Morón de la Frontera (Sevilla) en un festejo mixto que ha despertado un gran interés mediático y en el que estarán acompañados del rejoneador Diego Ventura. El encuentro llega abonado por el reconocimiento de la paternidad del mítico diestro de Palma del Río, después de que lo hicieran los tribunales de justicia.

Manuel Benítez, que desde el pasado mes de septiembre está divorciado de Martina Freysse, con la que estuvo casado 50 años, ha rehecho su vida con una nueva pareja. Sin embargo, aún no ha materializado el reencuentro definitivo con Manuel Díaz, nacido hace 48 años, fruto de la relación del torero con María Dolores Díaz.

Casualidad o no, a partir de la sentencia del divorcio, se han desencadenado los acontecimientos y a comienzos de 2017 transcendió que el encuentro de Julio y Manuel iba a ser un hecho. Los dos hermanos se encontraron por primera vez en público en los salones del hotel Colón el pasado 16 de febrero para presentar el festejo del sábado.

Díaz y Benítez comparecieron ante los medios junto al empresario que ha cerrado este reencuentro, el cordobés Antonio Sanz, que ha contado con los apoderados de ambos toreros para llevar a buen puerto la iniciativa.

En aquel acto ya se avanzaron algunas claves de la futura relación entre ambos, que abrían una puerta al futuro sin dejar de tener presente la rotunda figura paterna, que no acudirá a Morón a presenciar la actuación de sus hijos.

«Venimos del mismo sitio y vamos para el mismo lado», afirmó Manuel Díaz, al tiempo que aseguró que se sentía «orgulloso de aprovechar una oportunidad que nos brinda la vida y el toreo».

Su hermano Julio dijo que se encontraba muy feliz de haber dado este paso transcendental. «Estoy viviendo un sueño», añadió Manuel Díaz. «Ese sueño era anunciarme con El Cordobés y ahora me voy a anunciar con El Cordobés» precisó el mayor de los hermanos.

Julio desveló entonces que el padre de ambos veía con buenos ojos la cita, pero los últimos acontecimientos hacen prever que no estará presente, una ausencia que podría estar basada en la negativa de su hijo Manuel a participar en un tentadero promocional que tenía que haber servido de escenario del reencuentro público.

En cualquier caso, la situación profesional de ambos matadores parte de puntos muy diferentes. Por una parte, Julio Benítez aún no ha logrado enderezar una carrera que se acerca ya a la década como matador y necesita la fuerza de un triunfo importante en un escenario de resonancia como puede ser la plaza de toros de Morón de la Frontera.

Manuel Díaz, por su parte, ha admitido que se encuentra en los últimos compases de una larga trayectoria que vivió con mayor rentabilidad instalado en el llamado cartel mediático junto a toreros como Francisco Rivera, Jesulín de Ubrique, El Fandi o El Litri.