El año 2018 ha cerrado con datos positivos para el sector de la automoción en Córdoba. Según la estadística facilitada ayer por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), la patronal de los concesionarios Faconauto y la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), en la provincia se han matriculado un total de 12.668 turismos y todoterrenos, una cifra que supone un incremento del 10% respecto al año 2017. Se trata de una evolución positiva que se viene dando durante los seis últimos ejercicios, siguiendo así la senda de recuperación iniciada en el 2013. Además, es el mayor incremento experimentado en las provincias andaluzas en cuanto a venta de coches, aunque en las ocho se mantiene la tendencia al alza.

Desde el sector se ha recibido este dato con satisfacción, porque consolida un comportamiento positivo, si bien no se han cumplido las expectativas. Así lo apunta el presidente de la Asociación de Talleres y Automoción de Córdoba (Atradeco), Francisco Molina, quien afirma que las previsiones apuntaban a un crecimiento de las matriculaciones de vehículos nuevos de un 13%. Así, las ventas se han quedado tres puntos por debajo de lo esperado al cierre del ejercicio.

Si bien el dato acumulado del año es positivo, desde la patronal se pone el foco en la cifra del último mes del ejercicio. Así, diciembre ha registrado un descenso del 4,74% en las matriculaciones cerradas en la provincia, «un retroceso que hemos experimentado durante todo el último trimestre del año y que es preocupante para el sector», indica Molina, quien tiene claro la razón que ha llevado a este retroceso. «Se ha generado un entorno de incertidumbre e intranquilidad por los anuncios del Gobierno, lo que ha creado una crisis de confianza en la ciudadanía, que ha optado por posponer su compra de vehículos al no saber ni qué pueden o deben adquirir», añade el presidente de Atradeco.

Los profesionales del sector habían estimado un crecimiento del 13% respecto al año 2017

Desde la patronal se apunta que «ya ni siquiera da tranquilidad la compra de un híbrido, porque no se deja claro si es bueno o no, cosa que sí es». En cuanto al diésel, Molina manifiesta que no es perjudicial «porque año tras año se ha ido adaptando a la normativa» y anota «que se ha creado una alarma social respecto al año 2050 y a las no emisiones que ha perjudicado mucho al sector». A su juicio, el Gobierno tiene «intenciones políticas que no acompaña con intenciones estructurales». En esta línea, el presidente de Atradeco hace referencia a la necesidad de impulsar desde la iniciativa pública la recarga de vehículos eléctricos o la idoneidad de cambiar la normativa para que en las comunidades de vecinos de nueva creación se instalen puntos de recarga, y que en las antiguas se haga progresivamente. Además, añade, «hay que articular ayudas reales a la compra del vehículo cien por cien eléctrico».

En lo que se refiere al tipo de combustible del vehículo matriculado en la provincia, el 50,31% del total registrado en el año 2018 es gasolina, mientras que el 43,13% es diésel. Este último grupo experimenta una bajada del 16,45%, mientras que la venta de coches de gasolina sube un 42,06%. El dato relativo al mes de diciembre apunta a una bajada del 22,60% del diésel nuevo puesto en circulación, mientras que los gasolina crecen un 7,41%.

En cuanto al canal de compra, la empresa acaparó 3.023 adquisiones (un 14,46% más respecto al año anterior) y el de particulares se cerró con un crecimiento del 5,75%. No obstante, este ámbito tuvo una bajada del 12,17% en el mes de diciembre. Los rent a car (coches de alquiler) sí experimentaron una espectacular subida, al pasar de 147 al cierre del año 2017 a 416 en el pasado ejercicio, lo que supone un crecimiento del 182,99%.

El conjunto de España cierra con un dato positivo pese a cuatro meses malos consecutivos

En el conjunto de España, el mercado del automóvil ha logrado cerrar 2018 en positivo, a pesar de que los últimos cuatro meses del año han sido negativos en ventas, lo que no sucedía desde 2012. Las matriculaciones de turismos y todoterrenos nuevos ascendieron a 1.321.438 unidades, un 7% más que un año antes. A este registro se ha llegado después de que en diciembre las ventas cayeran un 3,5 % en comparación con el mismo mes de 2017, hasta totalizar las 99.291 unidades.

Con la bajada de diciembre, el mercado español del automóvil ha acabado el ejercicio con cuatro descensos consecutivos, después de que en agosto pasado entrase en vigor la nueva normativa de homologaciones y consumos WLTP, que hizo que se adelantasen las compras. Por comunidades, todas las regiones de España han acabado con alzas en sus ventas, salvo Cataluña, que ha bajado el 2,8 %, hasta 185.105 unidades y una cuota de mercado del 14 %. A la cabeza se ha situado Madrid (456.130 unidades, el 34,5 % del peso total y un crecimiento del 13,2 %), seguida de Andalucía (149.044, el 11,3 % y un 6,8 % más).