El plan de viabilidad contempla también medidas de comercialización encaminadas a captar distintos tipos de clientes desde este mismo año. La premisa global de la que parten las medidas es lograr que el parque Rabanales 21 se convierta en el centro de la industria tecnológica de la provincia. Según las fuentes consultadas, el documento detecta una importante línea de negocio en la industria agroalimentaria con vocación exportadora, y aconseja a Rabanales 21 que se centre en ella y busque firmas de la provincia ya consolidadas, de mediano tamaño, con capacidad inversora y potencial de crecimiento, que tengan en cuenta la innovación e investigación. En este sentido, propone ofrecer un plan de traslado o ampliación de instalaciones a conocidas empresas de la provincia que se adapte a sus necesidades. El planteamiento es hacerles una oferta especial para que se trasladen al parque tecnológico o levanten en él su centro de innovación, investigación y desarrollo, brindándoles también apoyo para la exportación de sus productos. El plan prevé también incluir en esa oferta a empresas destacadas de otros sectores diferentes.

Dentro de este marco, Rabanales 21 deberá prestar especial atención al clúster Halal. En este sentido, el plan de viabilidad ve grandes oportunidades en los productos Halal, por lo que propone que los proyectos relacionados con esta industria se implanten en el parque tecnológico, ya que atraerá nuevas empresas.

Rabanales 21 debe prestar especial atención a sus clientes, es decir, a las firmas ya instaladas en el parque. La idea del plan de viabilidad es que la sociedad ofrezca suelo a esas empresas en condiciones ventajosas para ampliar sus instalaciones. Además, aconseja que las entidades financieras socias del parque tecnológico (Caixabank y Cajasur) ofrezcan a esas empresas préstamos en condiciones más ventajosas que las del mercado.

Otra meta es atraer empresas de fuera de la provincia, elaborando previamente un estudio de mercado para detectar cuáles son las firmas, sobre todo del sector biotecnológico, que pueden estar interesadas en venir a la ciudad.

Por último, habrá un plan comercial específico para captar empresas startups, es decir, firmas emergentes relacionadas con el mundo de la tecnología, que cada vez son más (unas 120 hay en Córdoba) y a las que les puede interesar estar cerca de centros de investigación como el Imibic, el Ifapa, o el CeiA3.

El objetivo final es que con las medidas financieras y comerciales fijadas, el parque se quede con una deuda muy reducida en dos años, que podría cancelar sin problemas vendiendo parcelas. El plan se completa con medidas como el cambio de usos de algunas parcelas para lograr más zona de producción (IDR) y la permuta de suelo entre el Ayuntamiento y Rabanales 21.