El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hizo ayer un llamamiento al sector turístico para que apueste por la España interior y ayude así a combatir la despoblación. En su discurso de inauguración de la Cumbre Mundial del Turismo que se celebra en Sevilla, Sánchez también recalcó la necesaria aportación de este sector para promover un mundo abierto y tolerante, frente a quienes quieren «levantar muros» o crear «nuevas fronteras».

El jefe del Ejecutivo, que comenzó su intervención agradeciendo a los participantes en esta cumbre -entre los que se encuentran las principales empresas mundiales del sector- la inversión de 3.000 millones de euros que van a hacer en España en los próximos años, destacó el «enorme potencial» que tiene el turismo interior en España. No solo por su «enorme atractivo», sino también porque esta industria es una «gran oportunidad de futuro» para hacer frente a uno de los principales retos que tiene el país, el de la despoblación.

El presidente subrayó que España es la primera potencia del turismo mundial, y recordó que en 2018 se batieron todas las marcas, con 83 millones de visitantes internacionales y los mejores datos de gasto registrados. Puso en valor, además, que estos récords se lograsen en un momento en el que los competidores de España estaban también recuperándose, por lo que el primer puesto se ha logrado «por méritos propios» y no por deméritos o incertidumbres en los otros países.

Tras recalcar este éxito, Sánchez se detuvo en la necesidad de que el turismo apueste en España por lugares «fuera de foco», donde se esconden «auténticos tesoros». Subrayó así el «enorme potencial» que tiene la España interior, con «tradiciones seculares» y una «gastronomía auténtica», en definitiva todo aquello que hay más allá de la oferta de playa, y que «merece ser descubierto». Se trata, señaló, de impulsar el turismo en esa «España fascinante que quiere abrirse al mundo» y ayudar así, además, a combatir la despoblación.

Pedro Sánchez volvió a hablar de los riesgos de quienes no quieren un mundo abierto sino levantar «muros y fronteras». En ese contexto insistió en la importancia que tiene el sector turístico para promover una forma de «entender el mundo como un espacio abierto», frente a la «amenaza» que hay desde «distintos flancos».

«Se vuelve a hablar muros, de repliegues e identidades puras», lamentó Pedro Sánchez, quien por eso consideró «tan importante» este sector para entender el mundo «como un lugar de encuentro» y hacerlo «más pacifico y solidario».