La marca que definirá turísticamente a Córdoba, Málaga, Granada y Sevilla, y su promoción conjunta en destinos más lejanos es un producto que esperaban los representantes del sector empresarial y de agencias de viaje, según quedó ayer patente en la presentación de Málaga.

Allí, el presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), Rafael Gallegos, reconoció que era algo que «desde el sector veníamos reclamando» para que el turismo no se limite a «sol y playa», por lo que «esto nos da fuerza y esperanza porque por fin tenemos un producto que va a ser bueno para Andalucía y España». Gallegos señaló que el eje «debe ser el ejemplo que debe seguir el sector privado». Por otro lado, el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, mostró la disposición del sector al que representa «a colaborar e incorporarnos al proyecto», por lo que instó «a aprovechar el esfuerzo». Más allá de la creación y estructuración del producto, González de Lara puso énfasis en la «promoción y comercialización» del mismo, que considera «básica» y que, si se hace bien, logrará que sea «imbatible».

La directora general de Turespaña, Marta Blanco, tiene claro que «España se va a beneficiar de un producto así, porque es de calidad», que es el aspecto en el que, a su juicio, hay que competir, más que en precio. «Queremos atraer a turistas que tengan propensión al gasto», señaló. A su juicio, esta iniciativa «contribuye a la diversificación de los mercados emisores», y a la «desestacionalización».

Tras Japón, el eje buscará mercados que por volumen poblacional, niveles de renta, aumento de clases medias y altas o coyuntura económica puedan tener interés.