La Junta tiene prevista una reforma integral del Palacio de Congresos con un proyecto mucho más ambicioso del iniciado en el 2013. El informe de la Dirección General de Patrimonio propone dos soluciones para el edificio que considera viables. Fuentes de la Junta indican que, por un lado, está una rehabilitación por fases, que es la opción elegida, que complete las actuaciones iniciadas y pendientes de terminar desde el 2015, cuando surgieron los problemas con la empresa adjudicataria. Esas actuaciones son imprescindibles para que el Palacio de Congresos recupere su actividad, por lo que la Junta debe incluirlas en el proyecto que se redacte. Según el informe, las intervenciones consistirán en habilitar un acceso, tarea que comprende la rehabilitación de la capilla y la adaptación del paso a través de la galería. El informe considera que esta solución podría acometerse con mayor brevedad y consiste en la terminación de las obras de rehabilitación, otras acciones complementarias de cubierta y cabina, la climatización, la instalación de las butacas del salón plenario y una intervención parcial en la muralla califal. La intervención incluye, además, otras acciones no previstas en el proyecto original, que implican distintas mejoras que hay que hacer para cumplir con la normativa vigente.

La otra solución que plantea el informe es una rehabilitación general con un coste estimado de más de 7 millones y un cronograma temporal previsto hasta mitad del 2021, es decir, dentro de cuatro años.

Según las fuentes consultadas, la Junta ha optado por la solución más rápida que permita tener operativo el Palacio de Congresos en un año, aunque su idea es acometer la reforma general, que irá concretando a partir de ahora.