PP y Cs estrenan su gobierno al frente del Ayuntamiento de Córdoba con 23 medidas que prometen acometer en los primeros 100 días de gobierno, es decir, antes de que finalice el mes de septiembre. El documento, que las dos formaciones hicieron público ayer, contempla en primer lugar la implantación de un nuevo modelo fiscal, en el que se bajará el IBI y se suprimirá el ICIO, tal y como ambos partidos habían defendido en sus programas electorales.

Además, se incluye la creación de tres concejalías nuevas (Inclusión, Casco Histórico, e Innovación, Modernización y Transformación Digital); de la oficina de defensa de los derechos de los vecinos afectados por la ocupación ilegal, del Consejo de Participación Social y la recuperación de la Fundación Agrópolis.

Por otro lado, PP y Cs se comprometen a revertir en sus primeros cien días de gobierno el nombre de Cruz Conde, Vallellano y la plaza de Cañero; encargarán una auditoría de gestión de la Gerencia Municipal de Urbanismo; desistirán de la innovación de Cosmos y abandonarán el proyecto de tanatorio municipal de Cecosam. Esta medida, por cierto, recibió las críticas del sindicato CTA, al considerar que pone en peligro las cuentas de la empresa municipal para 2019.

PP y Cs también quieren poner en marcha un plan contra la exclusión social; redactar una ordenanza de ocupación de dominio público; impulsar un plan para la instalación de ascensores con la Junta, o solucionar la precariedad de la gestión de las instalaciones deportivas, (piscinas de la Fuensanta y Marbella, incluidas).

Al término de la reunión, José María Bellido afirmó que su gobierno se ha puesto a trabajar ya para que «desde hoy (por ayer) el cambio lo noten y le llegue a todos los cordobeses». Asimismo, explicó que las 23 medidas priman a generación de empleo, la reactivación económica y la bajada de impuestos: «Tenemos que potenciar la colaboración público-privada y dotar de seguridad jurídica a las empresas que están y a las que se quieren implantar», dijo el alcalde, que también ve muy urgente ordenar el Ayuntamiento. Por último, reiteró la promesa, expresada en su investidura, de que no dejará atrás «a nadie» y que pondrá en marcha un plan contra la exclusión social: «Esos vecinos van a sentir que el gobierno de su ciudad está con ellos desde el primer día», dijo. La primera teniente de alcalde, Isabel Albás, por su parte, insistió en que son un único gobierno «formado por un equipo de personas súpercompetentes» y trasladó la ilusión que ha palpado entre los cordobeses en estas primeras horas del nuevo gobierno.