El Centro de Transfusión de Córdoba tiene marcado como objetivo hace años rejuvenecer la edad media de su censo habitual de donantes de sangre, que es muy elevada, para así garantizar durante más años un número suficiente de voluntarios y de reservas sanguíneas. En lo que va del 2017 la cifra de donantes de sangre nuevos atendidos ha subido un 21%, gracias sobre todo a varias campañas especiales organizadas por el CTS, como las desarrolladas en el Oratorio San Felipe Neri en junio; en la Diputación en mayo; en el IES López Neyra en abril o en el colegio Séneca y en el campus de Rabanales en marzo. Cerca de 3.000 alumnos de 38 centros de enseñanza han recibido información sobre la donación de sangre, con el propósito de que cuando cumplan 18 años se comprometan y colaboren con este gesto altruista.

Otros colectivos de distintos ámbitos se están implicando también en el fomento de la donación de sangre. Por ejemplo, las cofradías, con campañas como las llevadas a cabo por la hermandad de la Borriquita de Montoro o las del Cristo del Amor y La Pasión, en Córdoba. Por otro lado, la Chirigota de San Lorenzo también ha aportado, con la difusión de un pasodoble sobre la importancia de donar sangre, plasma, plaquetas y médula, su granito de arena en la difusión de este gesto solidario que salva vidas. El CTS recuerda que la donación de sangre es completamente segura, ya que además de que antes de la extracción se realiza un reconocimiento médico, en ésta se emplea material estéril y de un solo uso. Los hemoderivados obtenidos en los ocho centros de transfusión sanguínea de la red pública andaluza se distribuyen a todos los hospitales públicos y privados de Andalucía. De hecho, Córdoba apoya muchas veces a otras provincias más deficitarias. MJ.R.