Una de las mayores atracciones incluidas en el programa del mercado exclusivamente en la jornada inaugural fue la proyección anoche de un espectáculo de 20 minutos de luz y sonido sobre la Córdoba romana y la presente, con fuegos artificiales como colofón, que se pudo ver sobre la fachada de La Calahorra. Cientos de cordobeses y turistas acudieron a la cita, que abarrotó el Puente Romano de espectadores, atraídos por el buen tiempo y por la novedad de la ubicación.
Los comerciantes instalados en el nuevo Mercado Romano se mostraban ayer cautos a la hora de valorar la nueva ubicación. "El domingo lo diremos", repetían en la mayoría de los puestos, "cuando veamos si aquí se vende más o menos que en La Corredera". Disfrazados con trajes a caballo entre el look romano y el medieval, algunos dudaban de si la respuesta del público se mantendría el fin de semana al caer la tarde. "Aquí hace más frío porque está abierto, no como en el centro, así que no sabemos si la gente se quedará cuando el sol se vaya". Este año, por primera vez, el mercado incorpora un puesto de la Cruz Roja, instalado junto al colegio Rey Heredia, que atenderá cualquier incidente.
