El consejo rector de la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA) aprobó ayer acudir a la ampliación de capital del parque científico y tecnológico Rabanales 21 con los 600.000 euros que le corresponden por su participación del 20% en esta entidad, a través de la Sociedad para la Promoción y Reconversión Económica de Andalucía (Soprea).

Este compromiso formal supone un espaldarazo a la captación de nuevos fondos en el parque, toda vez que Caixabank (35,5%), la Universidad de Córdoba (24,74%) y Cajasur (10%) ya han comunicado a esta entidad su disposición a colaborar, aunque con la condición de que lo hagan los otros socios. La decisión de IDEA, por tanto, alejaría a Rabanales 21 de la posibilidad de entrar en concurso de acreedores, aunque todo dependerá de los plazos en los que llegue el dinero.

La agencia informó ayer de que su último acuerdo (sobre el que no ha trascendido si tiene condiciones) se une al adoptado hace un mes para aplazar, por tercera vez desde el año 2014, el pago de un préstamo realizado a Rabanales 21 por importe de 10 millones de euros. Asimismo, hizo hincapié en que se enmarca dentro de las conclusiones de la junta general de accionistas del parque celebrada en junio, en la que se dio luz verde al plan de viabilidad y a una ampliación de capital de 3 millones de euros mediante aportaciones dinerarias pari passu entre los socios (participan según su porcentaje en el capital).

Rabanales 21 tiene una deuda contable de 25 millones de euros y el pasado febrero entró en preconcurso de acreedores, por lo que las iniciativas impulsadas posteriormente buscan que la entidad salga de esta situación. IDEA recordó que el plan de viabilidad contempla saldar inmediatamente la deuda ejecutada por la Agencia Tributaria (el embargo de suelo y de un edificio) y acordar con el Gobierno de España el aplazamiento del resto del pago pendiente. Además, recoge medidas comerciales, urbanísticas, de gobernanza y financieras «destinadas a asegurar los recursos precisos hasta final del 2020 (4,5 millones de euros) y la consolidación del parque como uno de los principales motores de generación de riqueza y empleo de calidad».

LA OPERACIÓN/ La ampliación de capital ha recibido el respaldo de todos los socios a excepción de la constructora Prasa (que posee el 4,5% de las acciones), ya que hasta ahora se ha descartado que pueda colaborar por sus dificultades económicas. Según la información publicada a finales del pasado mes de junio por la Agencia Tributaria, esta empresa cordobesa adeuda 98,7 millones de euros a Hacienda.

La operación contempla un desembolso de 3 millones de euros por parte de los accionistas para que el parque evite el que sería su segundo concurso de acreedores en tres años. La Diputación Provincial, que ostenta solo el 0,88%, confirmó ayer que acudirá (a través de Grupo Cinco) con 26.400 euros, la cantidad que le corresponde.

En el caso del Ayuntamiento de Córdoba (4,38%), hace unos días avanzó que se encuentra ultimando el procedimiento para dar el visto bueno a esta actuación en el próximo mes de septiembre y desembolsar un total de 134.000 euros. Entre las entidades públicas que forman parte del capital social del parque tecnológico también aparece, además de la Junta, la Universidad de Córdoba (24,74%), que ya ha aprobado en sus órganos de gobierno abonar 742.000 euros, aunque con la condición de que participe en esta iniciativa la mayoría de los socios.

En el ámbito privado, forman parte de la sociedad la ya mencionada Prasa y Cajasur (10%), que en los últimos días ha cambiado de postura y ha acordado poner 300.000 euros para contribuir a mejorar la situación de Rabanales 21. El accionista mayoritario es Caixabank (35,5%), una firma a la que correspondería desembolsar 1.065.000 euros y que ha expresado en distintas ocasiones su compromiso y su voluntad de acudir a la ampliación de capital «al mismo ritmo y del mismo modo» que lo hagan el resto de las entidades.