El hasta ahora senador del PP por Córdoba, Jesús Aguirre, asume la cartera de Salud y Familias, un área clave dentro del nuevo Gobierno andaluz.

-¿Cómo ha recibido la noticia de su nombramiento?

-Con mucho orgullo y entusiasmo. Espero cumplir con las expectativas y no defraudar a Andalucía y a los andaluces.

-¿Esperaba ser consejero?

-Había muchas quinielas, pero lo cierto es que tenemos un buen banquillo formado por un equipo de unas cien personas, y hay muchos que podrían haber sido elegidos. Estoy muy agradecido por la confianza que el presidente Juanma Moreno ha depositado en mí.

-¿Cuáles serán sus primeros pasos en la consejería?

-Primero tenemos que aterrizar y conocer el estado de las cosas. Ahora mismo estoy en una nube, pero en los próximos días ya estaremos en el tajo, que no es otro que resolver los problemas de la sanidad andaluza, que son muchos.

-¿Cuáles son esos problemas?

-Nuestro programa electoral, que está muy trabajado por los equipos provinciales que yo he coordinado, es un fiel reflejo de la situación de la sanidad en Andalucía y los retos que tiene por delante.

-¿Puede adelantar alguna medida?

-Entre los principales objetivos estará el de acabar con la subasta de medicamentos, facilitando así que la accesibilidad a los fármacos sea igual en todas las comunidades. También tenemos que incidir en la necesidad de fidelizar a los profesionales, con el reto de que se frene la fuga de batas blancas, así como afianzar la atención primaria como puerta de entrada al sistema sanitario.

Aguirre tendrá que renunciar a su acta como senador y la exedil Ana Tamayo será su sustituta.