La cifra de empresas que entran en concurso de acreedores o se declaran insolventes sigue cayendo en la provincia de Córdoba, lo que está permitiendo también que el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) reduzca el importe que ha de abonar en salarios o indemnizaciones. Así, en el 2018 se vieron afectados 650 trabajadores de 226 empresas, mientras que el importe en salarios e indemnizaciones fue el más bajo desde el 2009, con 4,5 millones de euros. De esta cantidad, 3,1 millones correspondieron a trabajadores y 1,3 millones a trabajadoras. Del total, 2,7 fueron en concepto de indemnizaciones y 1,7 millones por salarios.

Desde el año 2013, cuando se alcanzó el máximo con la asignación de 27,4 millones de euros para responder a la insolvencia de 1.858 empresas y 5.496 trabajadores, la cifra no ha dejado de caer. En este caso, el montante registrado en el 2018 en casi la mitad que el del ejercicio anterior, cuando el Fogasa destinó 8 millones para tal fin. Se ha pasado en un año de 903 trabajadores afectados a los 650 contabilizados el pasado ejercicio.

En el conjunto de Andalucía, Córdoba es la tercera provincia en la que menos dinero destina el Fogasa para abonar salarios e indemninaciones de empresas que se declaran en insolvencia o en concurso de acreedores. Así, por detrás solo se sitúan Jaén, con 2,6 millones, 154 empresas y 379 trabajadores, y Huelva, con 3,9 millones, 268 sociedades y 748 empleados. A la cabeza se coloca Sevilla, donde el Fogasa destina 21,4 millones para pagar 2.832 trabajadores de 1.017 empresas. En el conjunto de España, el Fogasa ha desembolsado 556 millones durante el pasado año para abonar sueldos e indemnizaciones a 81.790 trabajadores de 21.847 empresas.

Uno de los parámetros que permiten analizar el deterioro del tejido empresarial lo aporta, de manera indirecta, el Fondo de Garantía Salarial, un organismo dependiente del Ministerio de Trabajo, por lo que el hecho de que rebaje su partida da cuenta de una mejora de la situación. En la época dura de la crisis, con una importante falta de financiación y caída del consumo, la complicada situación del tejido empresarial cordobés ha hecho imprescindible la figura del Fogasa para responder a los impagos de las empresas que se declaran insolventes o entran en concurso de acreedores.

Ahora, el año 2018 mejora los datos del 2007 en cuanto al número de empresas por las que hay que responder. Entonces fueron 254 sociedades cordobesas, mientras que ahora han sido 226. Ese ejercicio se vieron afectados 764 trabajadores y la indemnización fue de 3,46 millones.

El Fogasa aporta salarios impagados que deben estar reconocidos en actas de conciliación judicial o administrativa o por certificación de la administración concursal.