Dos terceras partes de las personas que se benefician de las medidas del sistema de dependencia en Córdoba son mujeres y uno de los factores que incide en esta situación es su mayor longevidad respecto a los hombres, según recuerdan desde la delegación territorial de Igualdad. El balance del primer semestre del año apunta que la provincia tiene 19.248 personas acogidas a estas ayudas, de las que 12.791 pertenecen al colectivo femenino (66%) y 6.457 son hombres ( 33%). A nivel andaluz, los resultados son similares y, de los 186.125 beneficiarios registrados, los dos sexos contabilizan prácticamente el mismo porcentaje que la provincia.

En el caso concreto de Córdoba, el número de asistidos se ha incrementado en el último año en alrededor de un millar de personas y, acerca del grado que tienen reconocido, los números indican que en la mayoría de los casos la dependencia es severa (46%), pero otro grupo destacado es el de grandes dependientes (36%) y son menos quienes la tienen moderada (17%).

Desde la delegación de Igualdad explican, sobre la diferencia entre mujeres y hombres, que «los datos nos dicen que se produce un cambio de tendencia a partir de los 65 años, siendo la mayor diferencia porcentual entre los 80 y los 90 años». A esto añaden que «valorar los factores que inciden es difícil y es cierto que hay un mayor número de mujeres que se ven afectadas por un grado de dependencia».

Al hilo del incremento que se ha producido en la cifra de personas beneficiarias de este sistema, también avanzan que «el número de dependientes se irá incrementando en los próximos meses, fundamentalmente, por la calidad de vida que tenemos, basada en la prevención de la salud y la promoción de la autonomía personal. Además de la incorporación (al sistema) de las personas con grado 1», que son quienes tienen una dependencia moderada.

El Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia contempla distintas modalidades de prestación y en Córdoba se están ofreciendo un total de 24.786. En Igualdad subrayan que la media se sitúa en 1,3 prestaciones por beneficiario, precisando que muchos de ellos disfrutan de hasta tres medidas. La más implantada es la teleasistencia, que llega a 8.027 dependientes en la provincia, y a esta le sigue la ayuda a domicilio, con 6.024. Preguntados por esta tendencia, desde la delegación manifiestan que «no hay una causa concreta ni indicaciones al respecto, son los trabajadores y las trabajadoras sociales, como técnicos, quienes deciden, tras valorar las circunstancias en la entrevista que realizan a los dependientes o a sus familiares, cuál es el mejor recurso, el que más se adapta y conviene a las necesidades que tiene el dependiente». Así, explican que hay servicios o prestaciones que son excluyentes y otros que son compatibles, «como es el caso de la teleasistencia». A esto añaden que «la incorporación de los grados moderados de dependencia al sistema ha generado un incremento del número de casos» de esta ayuda.

En cuanto al resto de las prestaciones, la económica por cuidado en el entorno familiar asiste a 5.862 cordobeses y la atención residencial, a 3.178. Por otra parte, 1.270 dependientes han accedido a espacios de estancia diurna; 283 cuentan con una prestación económica vinculada al servicio; otras 139 se benefician de servicios de promoción de la autonomía personal y 3 perciben una ayuda económica para la asistencia personal. H