La segunda sesión del Foro de Debate 75 Ideas de Córdoba, organizado por Diario CÓRDOBA con la colaboración de la Fundación Cajasol, puso ayer sobre la mesa los retos que habría que asumir en la provincia de Córdoba para conseguir un cambio del sistema productivo que recupere la actividad económica, genere empleo y haga más competitiva la actividad empresarial, retos que pasan por contar con una mayor innovación, un tejido industrial más sólido y una mayor cualificación profesional de los trabajadores, para lo que también se hace necesario que la formación que se imparte se adapte realmente a la demanda del sector empresarial.
Aunque todas las partes participantes en el debate (Administración, empresa, sindicatos y universidad) coincidieron en señalar en que se están haciendo esfuerzos y poniendo recursos para lograr estos fines, Córdoba está todavía lejos de lograrlo.
Según las opiniones expresadas por los distintos expertos que han participado en el debate, también se hace necesario conseguir mayores cotas de mercado exterior, para lo que también es indispensable ganar en dimensión industrial y contar con profesionales cualificados en mercado exterior e idiomas que puedan abrir puertas y ampliar horizontes, además de empresas de transformación que consigan que el valor añadido se quede y revierta en la provincia.
Los expertos que anoche debatieron sobre la formación dual y los planes de empleo para mayores de 45 años, empleo digital para jóvenes, el mentoring, así como el plan de industrialización para Córdoba, la creación de una agencia de innovación empresarial o la internacionalización fueron el profesor Fernando Lara de Vicente, portavoz del comité coordinador; Manuel Carmona, delegado de Economía e Innovación de la Junta; Vanessa Bernad, consejera delegada de Extenda; Pedro Pablo Pérez, secretario general de la Universidad Loyola; Ignacio Fernández de Mesa, presidente de la Cámara de Comercio; Vicente Palomares, secretario provincial de UGT, y Marina Borrego, secretaria provincial de CCOO.
Así, el primero en señalar que para conseguir el cambio de sistema productivo es vital contar con un fuerte tejido industrial fue Fernando Lara de Vicente, portavoz del comité organizador del foro, quien añadió que esa mayor industrialización abriría puertas a la internacionalización, pero matizó señalando que esa industrialización no sería posible sin una mayor formación, por lo que la conexión entre el mundo laboral y empresarial y las universidades se hace necesaria.
Por su parte, Vicente Palomares, secretario general de UGT Córdoba, dibujó un paisaje «poco halagüeño», como consecuencia de la crisis, a la que calificó de devastadora, dejando como consecuencia más paro, empleo en precario, acrecentado por la reforma laboral, y un éxodo de jóvenes cualificados por falta de oportunidades. Y añadió, sobre la falta de empleo, que ante la carencia de industria en la provincia, sectores como el campo o los servicios se han convertido en sectores refugio. A su juicio, pese a que hay muchas iniciativas y proyectos existe «mucho papel pero poca realidad».
La responsable provincial de CCOO, Marina Borrego, empezó señalando que la alta tasa de desempleo que registra la provincia, que pasa del 27,5%, «no son números sino dramas familiares», por eso hizo un llamamiento a hacer entre todos esfuerzos para revertir la situación. Borrego aseguró que Córdoba podría ser líder, pero para ello es fundamental «crear empleo», aunque reconoció que no es fácil. Por ello, apeló a la implicación de las administraciones, para que inviertan en la industrialización de la provincia.
Por su parte, Ignacio Fernández de Mesa, presidente de la Cámara de Comercio, señaló que hay pocas empresas cordobesas (17) que se hayan sumado al proyecto del plan de industrialización de Andalucía, además de que también existe poco interés entre las empresas por la cooperación, situación que definió como la realidad «socioeconómica que hay», con hándicaps como el escaso interés por el mundo del conocimiento o que la «tecnología brilla por su ausencia».
