Cinco meses después de su salida de la mesa de veladores, el primer contacto para el regreso de los empresarios de la hostelería a este foro impulsado por el Ayuntamiento de Córdoba provocó ayer un conflicto en la Asociación de Hostelería y Turismo, Hostetur, que puso de manifiesto las fuertes discrepancias existentes entre sus dos máximos responsables: el presidente, Francisco de la Torre, y el vicepresidente, Alberto Rosales.

La polémica llega solo un mes después de que la Asociación de Empresarios de la Hostelería, Hostecor, y Córdoba Apetece, dirigidas por De la Torre y Rosales, respectivamente, anunciaran su integración en una nueva entidad para representar al sector. La reunión mantenida ayer por el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Pedro García, y el presidente de Hostetur dio lugar a un comunicado, emitido con el sello de esta asociación, en el que se informaba de que la junta directiva desautoriza la reunión de su presidente con el Ayuntamiento.

En el texto, se alude a un acuerdo adoptado el pasado 9 de marzo y Alberto Rosales afirma que el encuentro de ayer supone «una deslealtad inadmisible que se resolverá en el seno de la asociación por los pertinentes cauces, ya que su decisión no ha tenido los intereses del sector como objetivo». Sin embargo, De la Torre señaló a este periódico que Hostetur ni siquiera ha conformado su junta directiva, porque en la reunión convocada la semana pasada para hacerlo, Córdoba Apetece propuso a dos personas que no pueden ser miembro de este órgano porque no cumplen los estatutos, por lo que aún es necesario constituirlo.

De la Torre explicó que la primera propuesta estuvo conformada por siete personas, cuatro procedentes de Hostecor y tres por parte de Córdoba Apetece, incluidos sus dos responsables. En esta línea, destacó que la supuesta mayoría absoluta estaba formada por las dos personas antes referidas y por Isabel Rosales, que sí pertenece a Hostetur. También indicó que el acuerdo al que se alude no tiene validez.

El presidente de la patronal insistió en que «estamos encantados y espero que continúe la integración» con Apetece, aunque expresó su deseo de que su vicepresidente «no se deje llevar por intereses particulares, sino por los generales». En este sentido, apuntó que la reacción de Rosales «entiendo que se debe al afán de protagonismo» y sostuvo que «la reunión de hoy era necesaria, no se podía seguir manteniendo esta situación con Urbanismo». Junto a esto, subrayó que «había que escuchar» y avanzó que las decisiones se adoptarán más adelante, atribuyendo la polémica a «un malentendido por parte de Alberto Rosales y otras personas».

En referencia a las palabras con las que Rosales subrayó que no se adoptarán decisiones sobre la mesa de veladores sin contar con Comercio Córdoba, el presidente lo calificó como «una incongruencia» y precisó que «yo defiendo el interés de la hostelería, no del comercio», aunque «estaríamos encantados» de que esta federación «volviese». A primera hora de la noche, envió un mensaje a través del teléfono en el que aseguró que «el único interlocutor y representante válido ante los medios de comunicación e instituciones seré yo como presidente de Hostetur, conforme a la legalidad vigente».

El presidente de la patronal respondió así al anuncio realizado en el comunicado emitido por la tarde, en el que se informó de que «la junta directiva de Hostetur (...) ha acordado también por mayoría absoluta mandatar y autorizar a su vicepresidente a dirigir en exclusiva las relaciones de la asociación con todos los organismos y entidades públicas y privadas, debiendo informar de las mismas al comité ejecutivo y a la junta directiva». De la Torre aseguró a CÓRDOBA que «según los estatutos de Hostetur, el representante es el presidente y no se puede otorgar a nadie esa capacidad».

En cambio, la entidad manifestó que «la literalidad del acuerdo adoptado por mayoría absoluta es el siguiente: La junta directiva de Hostetur desautoriza a su presidente, Francisco de la Torre, por la decisión unilateral y carente de debate en este órgano de gobierno de aceptar una reunión con el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Córdoba Pedro García sobre el tema de los veladores y le advierte que tiene el criterio contrario de la misma para su celebración, al tiempo que delega en el vicepresidente de Hostetur, Alberto Rosales, todas las acciones que en este tema deban desarrollarse».

A esto sumó que «Hostetur no contempla ningún contacto con el Ayuntamiento de Córdoba sobre el tema de los veladores hasta que no se recuperen las condiciones de cohesión, lealtad y disposición de acuerdo que caracterizó a la mesa creada en su día». Por último, concluyó añadiendo que «el vicepresidente lamenta que la decisión de su presidente pueda afectar al proceso de reforzamiento de la representación de la hostelería y el turismo de la provincia de Córdoba, y que esta haya sido provocada por un representante institucional cuya capacidad para ejercer de sátrapa está ampliamente demostrada y cada vez más comúnmente admitida».

CONTEXTO/ La polémica entre Hostetur y el Ayuntamiento de Córdoba se enmarca en un escenario con diferentes intereses en juego. En este sentido, Hostecor y Apetece fueron acompañados por Comercio Córdoba en su abandono de la mesa de veladores y, desde entonces, se han distanciado de Urbanismo. Cabe recordar el nacimiento del clúster Fides el año pasado, integrado por Hostecor, Córdoba Apetece, Comercio Córdoba y la Asociación provincial de Agencias de Viajes, y algunas discrepancias mantenidas con el Consistorio, así como otros acercamientos. Cuestiones como la necesidad o no de impulsar nuevas plazas hoteleras; el modelo de gestión turística o la reciente suspensión de un evento de moda flamenca acusado de plagio, que iba a celebrarse en el Centro de Recepción de Visitantes, se encuentran entre las diferencias mantenidas con estas entidades. También se han producido aproximaciones como la reunión mantenida ayer o la participación en una iniciativa promocional realizada por el Ayuntamiento por parte del presidente de la Asociación de Agencias de Viajes, Antonio Caño. Como temas que habrá que resolver en el futuro han surgido, entre otros, la gestión de la formación en la Escuela de Hostelería o la cesión de Caballerizas Reales.